Como se esperaba, semana decisiva en el Tour. Tras una primera de supervivencia y transición, esta nueva semana comenzaba tras una contrarreloj por equipos que ayudaba a diferenciar algo mas los tiempos. Ya después de una merecida jornada de descanso, llegó el momento de las etapas puras de montaña. La batalla estaba servida y no dejaría indiferente a nadie.
La contrarreloj por equipos llegaba con claras limitaciones para algunas formaciones penalizadas por los abandonos o caídas. Aún así esta prueba (una de las mas nerviosas para los equipos pese a su corta duración), no habría claros vencedores o grandes distancias, y sí sorpresas y emoción hasta el ultimo segundo. Precisamente ese segundo fue el que le falto al conjunto Sky de Froome para alcanzar al BMC de Van Garderen, que conseguía la victoria en Plumelec. Quintana y MoviStar conseguía un gran tercer puesto a 4 segundos, mientras el Tinkoff- Saxo acaba cuarto perdiendo junto a Contador 28 segundos.
Después de una jornada de descanso muy esperada, llegaba la etapa número 10 de este Tour y con ella la montaña. Las distancias por el momento no eran muy grandes, pero nadie esperaba el golpe de autoridad que el líder del Sky, Chris Froome daría a sus rivales con un ataque a 7 km de meta con el que no solo ganaría la etapa sino que conservaría el maillot amarillo y lograría el de puntos rojos de la montaña. Asustaba el momento de forma de Froome frente a sus rivales, solo aguantaba perdiendo poco más de un minuto Quintana y prácticamente sentenciaba a Nibali con casi 7 minutos y Contador con poco mas de 4. La sorpresa de este Tour sin duda es Van Garderen, mantenía la segunda plaza pese a no soportar el ritmo final de esta etapa.
La siguiente ya no terminaba en alto, la general no se movía y solo es reseñable la primera victoria para el equipo de Contador a cargo de Rafal Majka concretando en victoria de etapa una fuga, y dando una motivación especial al equipo Tinkoff-Saxo.
En los pirineos y con calor de nuevo un español se hacía con el doblete de etapas en este tour, quien sino el corredor catalán del conjunto Astana, Joaquim Purito Rodríguez, lograba esta hazaña en una etapa dura pero muy bonita y competitiva. La alegría iba a ser doble para el Movistar que con esta victoria de Purito se colocaba como equipo líder del Tour. Los grandes empezaban a moverse pero gracias al trabajo de los gregarios y las reacciones rápidas de Froome las distancias se mantenían inmóviles, aunque al menos se vislumbran intenciones de disputa.
El corredor alemán Van Avermaet se hacía con la victoria en Rodez en una gran lucha frente al gran Peter Sagan. Mencionar que Nairo Quintana parece que será el indiscutible ganador en este Tour del maillot Blanco de los jóvenes pues el segundo clasificado en esta empresa no logra acercarse a menos de 6 minutos de él. Nairo conseguiría también colocarse como segundo en la general en la decimocuarta etapa con final en Mende con un tiempo de 3 minutos y 10 segundos perdidos del líder Froome que resolvía ataque tras ataque, con buena respuestas y sin perder la rueda de sus perseguidores inmediatos. El británico Steve Cummings se hacía con la victoria de etapa mientras los franceses Pinot y Bardet tras un gran esfuerzo, debían conformarse con ser observadores privilegiados del corredor del MTN-Qhubeka.
Greipel vencía al Sprint, de nuevo frente a Sagan en un día que se rodo muy rápido y donde muchos corredores se empezaron a reservar para los Alpes.
La última etapa antes del descanso la conseguía Rubén Plaza del Lampre que se estrenaba en el Tour y que hacía la tercera para los españoles tras las dos de Purito Rodríguez. Impresionante fue la caída de Barguil y Thomas en el descenso de Col de Manse al final sin consecuencias graves para ninguno de los dos. Nibali lograba recortar algo en la general. Sagan sorprendía con su quinto segundo puesto en una etapa en este Tour que consolida su posición en la clasificación de la regularidad frente a Greipel.
Chris Froome lidera con aparente solvencia, pero en el Tour nunca se sabe, es por ello que no baja la guardia.«Quedan cuatro auténticas etapas y, tal y como hemos visto hoy, atacará Movistar, Tinkoff y Nibali. No descansarán hasta París» Estas palabras de Froome son el reflejo de que el resto de favoritos no van a rendirse e intentarán por todos los medios ponérselo difícil al líder, a la vez que luchan por los puestos de podium en Paris. Quintana, Contador, Van Garderen, Nibali, Valverde... quizás sean los nombres que más empiecen a sonar en las próximas etapas. La carrera se reinicia el miércoles con 5 etapas aún por delante. Les esperan los Alpes, antes de llegar a París, y mucha batalla hasta alzarse con la gloria en los Campos Elíseos.