Aunque el ministro de Economía, Luis de Guindos, ha fijado 2014 como «el año del crecimiento», el ejecutivo no espera una pronta recuperación del mercado laboral. Las previsiones son de que la tasa de paro se mantenga por encima del 25 por ciento, al menos, hasta 2016.

No subirá el IVA y se prolonga un año más el actual Impuesto de la Renta de las personas Físicas (IRPF), hasta 2015. Habrá ocho reformas «clave» para sentar las bases de la recuperación y la creación de empleo, según ha explicado la vicepresidenta del gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, que ha dicho que «estas reformas aportarán 2 puntos al Producto Interior Bruto (PIB) en los próximos años.

Se creará una autoridad fiscal independiente, se acelerará la ley de transparencia, se impulsará la reforma de las Administraciones Públicas, y habrá una ley de desindexación, es decir se desvinculará la subida de los salarios de los empleados públicos de la inflación. No han explicado si ocurrirá lo mismo con las pensiones.

También se nombrará un grupo independiente para evaluar los efectos de la reforma laboral, cuando el paro afecta a más de 6,2 millones de personas y el Gobierno no ve una recuperación en varios años.

Se aprobará además un plan anual de política de empleo y una estrategia plurianual de activación para el empleo. Se hará una ley de apoyo al emprendedor y a la internacionalización, se aprobará por trámite de urgencia una ley de garantía de la unidad de mercado. Se han identificado más de 50.000 normas que se deben rearticular ha dicho Sáenz de Santamaría.

El ministro de Hacienda, Cristobal Montoro, encuentra «margen para subir algunos impuestos especiales, que no son hidrocarburos»

En cuanto a las proyecciones macroeconómicas se prevé una caída del 1,3 % este 2013, frente al 0,5 de la proyección anterior. En 2014 la economía crecerá un 0,5 por ciento y en 2015 un 0,9 por ciento, frente a las anteriores previsiones del 1,2 y el 1,5 % respectivamente. Ante este panorama el Gobierno no prevé llegar al 3% hasta 2016, el pacto con Bruselas era de hacerlo en 2014.

Por su parte la deuda de la administración pública seguirá creciendo, en 2013 será del 91,4 % y en 2016 del 99,8 % del PIB.