La primera visita del comisario de desarrollo se realiza en unas circunstancias especialmente dolorosas para Filipinas. Piebalgs, ha convocado en una reunión de emergencia a los embajadores de la UE en Manila en la que recibirán información directa del alcance de la devastación por parte de los equipos del departamento de Ayuda Humanitaria de la UE (ECHO) que están sobre el terreno.
El comisario ha señalado: «Todavía no tenemos un cuadro completo de la magnitud de la destrucción y pérdida de vidas, pero estamos decididos a garantizar que la ayuda de la UE llegue a los más vulnerables lo antes posible.» Ya se han destinado 3 millones de euros a los afectados por el tifón.
Aunque no son cifras oficiales se calcula que el tifón ha dejado a su paso por Filipinas unos 10.000 muertos. En la ciudad de Tacloban, la más afectada, muestra un cuadro de destrucción y desesperación de sus habitantes que carecen de comida y agua potable. España enviará dos aviones con asistencia humanitaria.
En cuanto a la ayuda a la zona de Mindanao se canalizará a través del Fondo Fiduciario de Mindanao para apoyar actividades de fomento de la paz y la gobernabilidad. Este fondo está financiado por la UE (70 %) y Suecia en una región asolada por el conflicto armado y la pobreza.