Su primer libro fue Cordon-bleu, publicado en 1987, y desde entonces sus novelas, que se han traducido a doce lenguas, proponen a los lectores un nuevo viaje cada vez. Ahora presenta Ecuatoria, una novela en la que nos invita a convertirnos en exploradores para descubrir los encantos de África.
euroXpress- Los viajes son una constante en sus obras, ¿qué nos propone esta vez en Ecuatoria?
Patrick Deville- Ecuatoria es algo más que un relato de viajes; es un libro africano. Es cierto que hay grandes desplazamientos geográficos. La historia atraviesa África ecuatorial, pero además, hay un componente histórico. La novela se remonta a 1860 y hace un repaso de siglo y medio en la historia de África.
eXp- ¿Podría decirse que el continente africano tiene algo de especial?
P.D- La historia de África es totalmente diferente a cualquier otra historia. En 1860, aunque ya había mapas de la costa, todo el centro de áfrica seguía siendo un blanco del mapa. El libro comienza con las historias de los exploradores como el italo-francés Savorgnan de Brazza, el británico, Henry Morton Stanley, o el escocés, David Livingston. Parto de esa historia para después contar la colonización que llega tras la exploración y posteriormente los movimientos de descolonización. Es una historia que empieza con una decisión del presidente de El Congo, Denis Sassou-Ngeuesso, pero que termina desplazándose hasta Argelia.
eXp- En su último libro, Peste y Cólera, hacía un recorrido de más de cien años a través de los trabajos del médico Alexandre Yersin ¿Tiene algo en común con Ecuatoria?
P.D- En efecto en las dos novelas hay una dimensión histórica. Peste y Cólera también es una historia de exploración. De hecho el personaje central también había sido explorador profesional durante algunos años. En aquel libro también hablaba de las disputas coloniales entre Francia, Inglaterra y Alemania, que en este caso se aprecian a través de la competición científica. La peste es una victoria del instituto Pasteur en Francia, y el cólera es un logro de Alemania; y de ahí el título.
eXp- Ha compartido ponencias sobre viaje y literatura con Eduardo Martínez de Pisón, reconocido geógrafo. ¿Qué tienen en común la literatura y la geografía?
P.D- En las novelas basadas en hechos reales, las novelas sin ficción, hay siempre un trabajo geográfico, histórico, político y biográfico. En la mayoría de los casos se cuentan vidas paralelas. En Peste y Cólera, por ejemplo, existe un paralelismo entre los dos científicos y además hay muchas referencias a escritores y poetas de la época. En Ecuatoria también está presente Julio Verne. Por lo tanto no me sorprende que se establezca una relación entre los escritores y los trabajos de historiadores y geógrafos.
eXp- Este año el premio Nobel de Literatura ha sido para Patrick Modiano; ¿está de moda la literatura francesa?
P.D- El Nobel de Modiano es una excelente noticia. Es curioso, porque lo ha recibido poco tiempo después de que premiaran a Le Clézio (Noble de Literatura en 2008). No creo que tengamos que entenderlo como un logro olímpico, pero sí es cierto que la literatura francesa contemporánea mantiene un comportamiento excelente.
eXp- A pesar de que cada vez se produce más literatura, las encuestas indican que cada vez se lee menos ¿Está de acuerdo con lo que dicen las estadísticas?
P.D- Habría que hacer estudios matemáticos y demográficos para estudiar bien las cifras, pero no tengo la sensación de que haya menos lectores. De hecho, creo que hoy en día se venden más libros que antes. En cualquier caso, lo importante es que se escriban y se publiquen los libros. Los poetas en Francia, por ejemplo, venden muy poco pero sí hay grandes lectores de poesía.
eXp- ¿Se puede vivir siendo escritor?
P.D- ¡Yo vivo de ello!
eXp- ¿Cambia mucho la situación para un escritor dependiendo del país en el que se encuentre?
P.D- Efectivamente, las políticas culturales y las ayudas institucionales a la lectura varían dependiendo del país. Cualquier ayuda para la lectura es muy importante, también las que se dan a los libreros y los traductores. En Francia la política del libro es muy importante. Hay, por ejemplo, un organismo llamado Centro Nacional del Libro que da ayudas a los autores que no tienen el apoyo de grandes editoriales. Es una mezcla curiosa de políticas públicas y capitalismo, porque las editoriales, al fin y al cabo, son empresas privadas.
eXp- Intente convencerme, ¿Por qué debería leer Ecuatoria?
P.D- Los lectores se van a encontrar una historia en la que hay diferentes niveles. En primer lugar es una novela de aventuras, como lo era Peste y Cólera. Pero después hay otras capas y niveles de lectura más políticas y también hay una dimensión histórica.