Para Jean-Jacques Dordain, director general de la ESA, la cooperación para explorar «lo infinito, lo infinitamente grande que es la base de las ciencias del universo y de lo infinitamente pequeño por la física de alta energía, abre nuevas vías para la ciencia y la tecnología con el consiguiente fortalecimiento de la industria europea».
La investigación que resulte de la colaboración de la ESA y el CERN incluirá el desarrollo y caracterización de materiales innovadores para aplicaciones en condiciones extremas, desarrollo de nuevas micro-tecnologías para su aplicación en sensores en miniatura y el desarrollo y prueba de detectores de alto rendimiento para experimentos de física de alta energía y cargas útiles espaciales.
El CERN y la ESA tienen raíces comunes y comparten una larga historiade investigación. Este año el CERN cumple 60 años y la ESA 50, una ocasión para celebrar la memoria de un científico que fue uno de los fundadores de ambas organizaciones europeas: el italiano Edoardo Amaldi (1908 – 1989).
Amaldi tenía una fe inquebrantable en el carácter abierto de la ciencia y en la necesidad de la cooperación internacional. Tras la creación del CERN, fue nombrado secretario general de la organización de forma provisional.
Cuando su nombramiento se hizo efectivo en 1958 se alió con el físico francés Pierre Auger para instar a los gobiernos europeos a que crearan una organización europea para la investigación espacial, siguiendo el modelo del CERN. La insistencia llevó a que se fundara la Organización Europea de Investigaciones Espaciales (ESRO), que más tarde sería la Agencia Espacial Europea (ESA).