Un ciclo de megaeventos y megaproyectos se clausura en Brasil con los Juegos Olímpicos que acogerá Rio de Janeiro entre el 5 y el 21 de agosto, con un saldo negativo dejado por la megalomanía, que también alimenta la crisis económica y política en que está sumergido el país.
El interrogatorio al exmandatario Luiz Inácio Lula da Silva por la Policía Federal, este viernes 4 en São Paulo, apunta a una radicalización de la crisis política en Brasil, reforzando así el intento de inhabilitar a la presidenta Dilma Rousseff.