El suicidio de un farmacéutico jubilado griego en la emblemática plaza Sintagma de Atenas, ha conmocionado a la sociedad helena y europea. Su desesperación ha sacado a la luz la difícil situación que sufren millones de personas en Europa a causa de la crisis. No sabemos mucho de Dimitris Christoulas, pero miles de griegos se han visto reflejados. en las notas manuscritas que guardaba en su bolsillo, en las que se leía «No puedo vivir en estas condiciones, me niego a buscar comida en la basura».