Este 30 de junio finaliza la presidencia española del Consejo de la Unión Europea, una presidencia solvente y eficaz, según el secretario de Estado para la UE, Diego López Garrido.
En su opinión se ha conseguido casi el cien por cien de los objetivos. Había 148 iniciativas preparadas y se han cumplido, dice, 144. Sólo ha señalado como asuntos que estaban en el programa y no se consiguieron las cumbres con Estados Unidos, Egipto y Unión por el Mediterráneo y la acción comercial con Rusia.
En el otro lado de la balanza, López Garrido destaca que España ha sabido marcar el rumbo del funcionamiento de la Unión para los próximos años, al haber coincidido la presidencia con la entrada en vigor del Tratado de Lisboa y estrenarse los nuevos cargos institucionales. En economía, el secretario de Estado adjudica a España la protección de la zona euro y las medidas de previsión para evitar nuevas crisis. Ha citado también la estrategia 2020, la iniciativa legislativa popular, la orden de protección de víctimas y el Servicio europeo de acción exterior.
En conjunto, ha dicho López Garrido, «se ha hecho una buena labor» y ha recomendado a las fuerzas políticas españolas, que criticaron en bloque la actuación de la presidencia, que hagan un estudio detenido de los resultados y juzguen por los hechos y no por las imágenes.