El informe de Save the Children corrobora el de Cáritas presentado hace cerca de un mes en el que alertaba del aumento de niños en situación de pobreza y que el Ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, consideró que «no se correspondía con la realidad». El director general de la ONG, Andrés Conde, asegura que existe, pero que «es poco visible».
Según la organización, los niños con mayor riesgo de exclusión social son los que se encuentran en las urbes, con familias monoparentales, de origen extranjero o cuyos padres tienen un bajo nivel de estudios.
El informe indica que España no mejora a la hora de reducir la pobreza infantil, con la ayuda que el Estado otorga a las familias de «291 euros al año, 24 euros al mes», tal como ha señalado Conde. Antes de las prestaciones sociales el porcentaje de niños que viven bajo el umbral de la pobreza era de un 36,8 % , y tras las ayudas, de un 29,9 %. El país de la UE que más ha sabido reducir la pobreza ha sido Irlanda, cuya tasa ha descendido en un 32 %.
Save the Children ha querido recalcar que la lucha contra la pobreza infantil no debe esperar a la mejora de la situación económica, ya que «lo que se pierda ahora, no se recuperará nunca», ha señalado Conde. Asimismo, también hacen hincapié en que «la pobreza infantil no tiene pasaporte». Actualmente casi 27 millones de niños están en riesgo de pobreza o exclusión en Europa, «incluso en los países nórdicos», ha afirmado Ester Asín, directora y Representante de la organización ante la UE.
Asín también ha afirmado que los ingresos familiares son uno de los determinantes de la pobreza infantil, pero no es sólo la falta de dinero. «No significa que lass necesidades básicas, como comida, agua o ropa, no estén cubiertas, también está relacionado con la exclusión social, la falta de acceso a servicios o que los niños no puedan relacionarse o participar en eventos socioculturales con otros niños de su edad», ha aseverado.
Además, los niños en riesgo de exclusión social suelen sufrir más la violencia en los hogares debido, en parte, al estrés por la falta de trabajo de sus progenitores, muchos niños son víctimas de situaciones en las que los padres no tienen empleo, o bien son «trabajadores empobrecidos», ya que no reciben un sueldo digno.
La desigualdad en España, país en el que se encuentran las mayores brechas entre ricos y pobres de la UE, es «una de las causas de la pobreza, pero también una de sus consecuencias», ha señalado Asín. Según el último informe de la OCDE, España es el país donde más han aumentado las desigualdades sociales.
Según ha alertado Save the Children, estas desigualdades se manifiestan, sobre todo, en la educación, ya que en España la tasa de abandono escolar es del 25 %, la más alta de la UE. «Todo refuerzo en la educación es imprescindible», ha afirmado Conde y ha añadido: «La lucha para acabar con la pobreza infantil debe ser un problema de Estado».