El informe preliminar publicado por expertos holandeses ha revelado que el avión de pasajeros MH17 fue perforado por «objetos de una gran energía». En dicho documento se ha descartado un fallo humano o mecánico, y han asegurado que será necesaria una investigación más profunda para conocer el origen de los objetos que provocaron el accidente.
Según los enviados por parte del Gobierno holandés, teniendo en cuenta el «daño observado en el fuselaje y la cabina» de la aeronave concluyen que el avión se partió en el aire fruto del impacto de un gran número de proyectiles. En ningún momento se utiliza la palabra misiles en el informe pero sus conclusiones apuntan a que fue derribado.
Además, los expertos han coincidido en que no se trata de un fallo mecánico o humano, dado que las conversaciones que mantuvieron los pilotos no alertaban de un posible fallo, y la información tanto de la caja negra como las imágenes de los satélites, descartan esas hipótesis. El documento indica también que el aeroplano envió su última señal 20 minutos antes de estrellarse en una zona ucraniana controlada por los rebeldes.
Los expertos enviados sostienen que se publicará un informe completo dentro de un año, en el que se tratará de esclarecer lo que ocurrió en el accidente que costó la vida a 298 personas el pasado mes de julio en los alrededores de la aldea ucraniana de Hrabove. Una zona a la que no han podido acceder los autores de la investigación por la negativa de los rebeldes ucranianos.