Mª Ángeles Fernández y J. Marcos / Lisboa
El hasta hace poco presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durão Barroso, cambia Bruselas por Davos. Según ha publicado el periódico portugués Expresso, Barroso será el presidente del Consejo Global para el Futuro de las Organizaciones Regionales del Foro Económico Mundial de Davos, cargo que ocupará hasta 2016. Barroso, cabeza de la Unión Europea durante diez años, había anunciado que no iba a volver a la política ni a ser candidato presidencial en Portugal, pero también había prometido mantener una participación pública activa.
Además de este cargo, el político portugués va a iniciar colaboraciones con dos universidades de prestigio: la Universidad Católica de Lovaina, en Bélgica, y la Universidad de Ginebra, Suiza. En esta última, obtuvo su diploma de Estudios Europeos e hizo un máster en Ciencias Políticas. En ambas instituciones impartirá conferencias, ya que su intención es entrar en un círculo internacional de conferenciantes.
«Con la sensación de haber cumplido». Así dejó Barroso la presidencia europea el pasado 31 de octubre, según explicó en una larga entrevista a la revista lusa Visão. «Dejo una Europa más unida, más abierta y más fuerte», aseguró en su discurso de despedida. De hecho, ha insistido en la importancia de que Grecia siga en la Unión Europea como un ejemplo para corroborar estas palabras; sin olvidar, según considera él mismo, que el mayor logro de su mandato es haber sido capaz de resistir la mayor crisis de la historia de la Unión.
«Nunca hubo en la historia de la integración un presidente que tuviese tantos enfrentamientos con los Estados», considera Barroso, quien recuerda el dúo Merkel-Sarkozy, y sus enfrentamientos con Francia por la cuestión de la comunidad gitana y la oposición de Alemania por el «paquete climático». Y es que, el que fuera primer ministro de Portugal entre 2002 y 2004, se muestra en la entrevista con la publicación portuguesa orgulloso de su estrategia climática: «En el primer mandato lanzamos la legislación contra las emisiones y ahora he visto aprobada mi propuesta de reducir un 40 por ciento los gases de efecto invernadero. Europa está en la vanguardia en esta materia».
«Siempre apoyé a Portugal»
Los últimos años de Durão Barroso al frente de la Comisión han estado marcados, sin duda, por la situación económica de los países del Sur de Europa, entre ellos el suyo, Portugal, que tuvo que recurrir a un rescate de tres años a manos de la troika (Comisión Europea, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional). «Todos saben que soy portugués y que esa sensibilidad me llevó a estar, en los debates más difíciles, siempre del lado de la solidaridad. Como en el caso de los fondos estructurales que Portugal tiene y que no serían los mismos si no fuese por el apoyo que yo y la Comisión Europea dimos», reconoció días antes del final de su mandato. «En el marco europeo siempre apoyé a Portugal (...) Cuando tuvo que pedir el rescate [en referencia al exprimer ministro José Sócrates, ahora en prisión], fui yo quien convencí a los líderes de la oposición, Passos Coelho y Paulo Portas», añadió. A lo largo de la entrevista, Barroso recuerda también que cuando él salió del Gobierno luso la deuda estaba en el 56 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) y que ahora está en el 130 por ciento.
«He recibido invitaciones del área académica, para conferencias, dada la experiencia que he acumulado», reconoce sobre su futuro. Lovaina, Ginebra y Davos le esperan.