Investigadores de las Universidades de Cantabria, Toulouse y Burgos han podido datar las pinturas rupestres más antiguas que se conoce hasta el momento en Europa en la cueva guipuzcoana de Altxerri B. Las conclusiones se han publicado en la revista Journal of Human Evolution.
El conjunto rupestre de Altxerri fue descubierto en 1962 y estudiado desde entonces por varios investigadores. En la cavidad principal hay un importante conjunto de pinturas del periodo Magdaleniense reciente de entre 14.500 y 11.700 años. En 2008 fue incluida, junto a otros conjuntos rupestres paleolíticos cantábros en la lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO.
Desde 1966 los científicos han tenido referencias de otra galería superior con pinturas rojas que nunca ha sido estudiada en profundidad hasta ahora.
Además de un gran bisonte pintado en la pared se han descubierto otras figuras entre las que destacan un felino y un oso, muy similares figurativamente a otras pinturas halladas en cuevas del Paleolítico Superior.
Según Aitor Ruiz, uno de los dos científicos que han dirigido el estudio, «la importancia del trabajo es confirmar que desde la llegada a Europa Occidental el homo sapiens realizaba actividad gráfica y tenía una capacidad pictórica relativamente compleja».