Mª Ángeles Fernández y J. Marcos
La postura que ha tomado el nuevo Gobierno griego frente a la Unión Europea y el Banco Central Europeo ha despertado alarmas como la del Ejecutivo alemán, pero también esperanza en otros puntos de la Unión. Portugal, gobernado por la coalición conservadora PSD-CDS, tampoco quita el ojo a las negociaciones de Alexis Tsipras y Yanis Varufakis, primer ministro y ministro de Finanzas heleno, respectivamente. La lectura de esa observación no tiene un único signo.
La esperada visita del primer ministro griego Alexis Tsipras a Bruselas ha sido fugaz, su apretada agenda también tenía marcada París. A primer hora de la mañana, el mandatario heleno se ha reunido con el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, sonriente y dispuesto a vender su plan de bonos de crecimiento para ayudar a Grecia.
Mª Ángeles Fernández y J. Marcos / Lisboa
El hasta hace poco presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durão Barroso, cambia Bruselas por Davos. Según ha publicado el periódico portugués Expresso, Barroso será el presidente del Consejo Global para el Futuro de las Organizaciones Regionales del Foro Económico Mundial de Davos, cargo que ocupará hasta 2016.
Este viernes ha sido un día políticamente intenso. A primera hora de la mañana el Reino Unido y Europa respiraban tranquilos tras conocerse que los escoceses no se separarían de Londres. Horas después Alex Salmond, el líder independentista que ha mantenido en vilo a las capitales europeas, ha anunciado que dimitía para facilitar «un nuevo liderazgo» en las futuras negociaciones con el gobierno británico. Unos minutos antes el expresidente francés, Nicolas Sarkozy, anunciaba que volvía a la política «por su inmenso amor por Francia» y porque «merece otra oportunidad».
El expresidente francés, Nicolas Sarkozy ha anunciado en su página de Facebook que se presentará a la presidencia de su partido la UMP con el objetivo de ser su candidato en las elecciones presidenciales de 2017. «Soy candidato a la presidencia de mi familia política», ha escrito en su perfil el ex jefe del estado francés entre 2007 y 2012, tras «una reflexión en profundidad».
El Reino Unido, Europa y la comunidad internacional miran con expectación lo que ocurra hoy en Escocia, en un referendum por la independencia calificado de histórico. Gane la opción que gane otras regiones nacionalistas de Europa se verán afectadas en sus aspiraciones independentistas. Las encuestas dan unos resultados muy ajustados y en caso de que ganara el SI, la Unión Europea debería tomar una decisión que hasta ahora era tabú, la pertenencia o no a la UE del nuevo país independiente. euroXpress ha hecho un seguimiento informativo sobre las cuestiones independentistas que existen en varios países de la UE.
Por Esther Herrera / Bruselas
En menos de 24h Escocia decidirá si se convierte en un país independiente o si se mantiene como una región autónoma del Reino Unido. La UE mirará de reojo los comicios y la Comisión Europea ya ha dicho que «respeta» la opinión de los escoceses. Pero Bruselas mantiene la vista también en Cataluña, que aboga por el derecho a decidir el 9 de noviembre, a pesar de que la Constitución española no lo admite. Por el momento, el presidente catalán, Artur Mas, ya ha avisado esta semana que, en caso de que no pueda celebrar la consulta, habrá elecciones plebiscitarias anticipadas.