En Bruselas vuelve a aparecer el fantasma de un invierno europeo sin calefacción. El primer ministro ruso, Vladimir Putin, ha avisado a la presidencia sueca de la Unión de que el suministro de gas desde su país a la UE se verá interrumpido si Ucrania no paga el combustible comprado a Rusia.
Putin asegura que Ucrania tiene fondos prestados por el FMI pero además recuerda que la UE no da dado ni un céntimo de la ayuda prometida a Ucrania en anteriores crisis. Una cuarta parte del gas que se consume en Europa viene de Rusia y el 80 % del total pasa por territorio ucraniano. El ministro español de Asuntos Exteriores está hoy en Kiev y el secretario de Estado para la UE, en Moscú.