La UE ha defendido en numerosas ocasiones el papel de la energía nuclear en la lucha contra el cambio climático y como garantía del abastecimiento energético. Sin embargo, muchas de las centrales nucleares que están en activo en el territorio europeo se están quedando obsoletas y necesitarán inversiones muy fuertes para sacarlas adelante.

También el grupo de reflexión sobre el futuro de la UE encabezado por el expresidente español, Felipe González, defendía en sus conclusiones la importancia de la energía atómica para asegurar el suministro energético europeo. La fuerza de la naturaleza, quizá empujada por el cambio climático, ha venido a desbaratar esas teorías ¿o no?.

«Un aviso para el mundo». Así se ha referido la canciller alemana, Angela Merkel, a lo ocurrido en la central nuclear japonesa de Fukushima después del terremoto y el tsunami. La consecuencia es que Alemania revisará los estándares de seguridad de sus centrales atómicas. Sesenta mil personas se manifestaron ayer en el país contra la energía nuclear, defendida cada vez más por los gobiernos europeos. El debate sobre la seguridad nuclear se ha reabierto.

La Unión Europea no es partidaria de imponer un embargo sobre el petróleo y el gas procedentes de Libia porque la gran mayoría de los pozos ya no están bajo el control de Muamar El Gadafi sino de los rebeldes.

El comisario de Energía, Günther Oettinger, ha dicho este lunes que si no surgen nuevas revueltas en otros países árabes, en los próximos días se alcanzará el pico del precio del petróleo.

Las diferencias entre Moscú y Bruselas se han puesto al descubierto y en público. El primer ministro ruso, Vladimir Putin, ha denunciado ante los periodistas la nueva legislación de la UE que impide al gigante ruso Gazprom controlar los gasoductos. A su lado, el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, ha defendido una normativa que se aplica tanto a las empresas europeas como a las exteriores.

Cuando todas las alarmas están encendidas por la subida del petróleo, Putin alerta sobre un aumento de precios energéticos provocado por la normativa europea. Barroso responde que «ya pagamos por el gas ruso y a buen precio».

Italia y España son los únicos países de la Unión Europea que importan gas de Libia y no tendrán problemas si el régimen de Gadafi decidiera interrumpir el suministro. La Comisión Europea estima que la diversificación de las fuentes de energía ha dado resultados y hay suficiente gas para abastecer a compañías y hogares.

El ministro español de Industria, Miguel Sebastián, ha dicho que España cuenta con reservas estratégicas de gas natural para 30 días y para 90, en el caso del petróleo.

El Fondo de rescate y la coyuntura económica actual robaron protagonismo a la energía y a la innovación en lo que pretendía ser una Cumbre sobre estos temas el pasado día 4 en el Consejo Europeo. Mejorar las infraestructuras, el cumplimiento de la legislación y fomentar las energías renovables son aspectos fundamentales para lograr un crecimiento económico en la Unión. Favorecer la inversión privada, la sinergia entre los Estados miembros y aprovechar el talento en investigación pueden ayudar a conseguirlo.

Compañías europeas, entidades, organizaciones ecologistas y europarlamentarios han firmado un documento en el que piden a la UE un objetivo a largo plazo para garantizar que toda la energía que se consume en Europa provenga de fuentes renovables.

Ante el próximo Consejo Europeo del 4 de febrero, en el que se tratará la eficiencia energética deseable para la UE, los firmantes piden que Europa «lidere con el ejemplo» los avances en energías alternativas.