Al recibir Ban Ki-moon, en la Universidad de Harvard el premio Humanitario del Año 2014 se ha referido a la importante conferencia internacional sobre armas nucleares que ha comenzado este lunes en Viena.La conferencia, se centra en el "impacto humanitario" que provocaría la detonación de una sola de las más de 16.300 armas nucleares que existen en el mundo.
Jayantha Dhanapala, ex secretario general adjunto de la ONU para Asuntos de Desarme (1998-2003), ha recibido el Premio al Logro Internacional por el Desarme Nuclear de la agencia de noticias Inter Press Service (IPS), en una ceremonia realizada en la sede del foro mundial en Nueva York.
Los militares españoles entrenarán y formarán a las tropas iraquíes ante el avance del Estado Islámico en ese país. Con esta operación, España colabora con la coalición internacional, en la que participan activamente varios países europeos para luchar contra este grupo terrorista que actúa en Irak y Siria y que tiene como objetivo expansionarse por el norte de África.
El 6 de agosto, aniversario del lanzamiento por Estados Unidos de la primera bomba atómica sobre la ciudad japonesa de Hiroshima en 1945, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, dijo «Una de las grandes paradojas de la ciencia moderna» es que los seres humanos busquen vida en otros planetas mientras que las potencias nucleares del mundo mantienen y modernizan sus armas para destruir la vida en la Tierra.
Mairead Maguire*
Belfast, (IPS) - ¿Cómo se puede justificar que en el siglo XXI continuemos entrenando a millones de hombres y mujeres para engrosar los ejércitos y mandarlos a la guerra? La mortandad de civiles en las guerras es inmensa y la destrucción de la vida de militares es altísima. Agréguese el coste económico y ambiental, y el coste del potencial humano que científicos y expertos, en vez de dedicar al bienestar y la salud, emplean para la investigación y producción de armas cada vez más letales.En los últimos años, la OTAN se ha convertido en cosa de nórdicos. Al danés Anders Fogh Rasmussen, le sustituye al frente de la Alianza del Atlántico Norte, el noruego Jens Stoltenberg, de 55 años, que coge el mando del organismo internacional en un momento de grantes tensiones, principalmente a las puertas de Europa: Afganistán, Ucrania y la lucha contra el Estado Islámico en Siria e Irak. Es la primera vez que asume la presidencia un país europeo no perteneciente a la UE.