La información de los ciudadanos a la que Estados Unidos tiene acceso como consecuencia de la colaboración en materia penal con la UE, como los datos de los pasajeros aéreos o las operaciones financieras gozarán, según el ejecutivo de Bruselas, de un alto grado de protección.
Para ello prepara un acuerdo marco con estados Unidos en el que se planteará que sólo se autorice el envío y tratamiento de los datos cuando haya una finalidad lo sufientemente justificada en el marco de la lucha antiterrorista y criminal.
Los ciudadanos europeos tendrán derecho a acceder a suus datos personales y a rectificarlos si consideran que son inexactos. También podrán presentar un recurso administrativo y jurisdiccional en Estados Unidos, independientemente de la nacionalidad o lugar de residencia si creen que sus datos se han utilizado de una manera ilícita. Para velar por el respeto a la vida privada habrá autoridades públicas independientes.
El futuro acuerdo necesitará una estructura jurídica específica. La comisaria de Justicia Viviane Reding, ha asegurado que pretende llegar a un acuerdo «digno de ese nombre». Por su parte la comisaria de Interior, Cecilia Malmström, ha hecho hincapié en que beneficiará a los países de uno y otro lado del Atlántico.
Para que la Comisión Europea pueda comenzar las conversaciones con Washington, los veintisiete deberán dar su aprobación.