Bruselas busca más protagonismo para Barroso

La Comisión europea está dispuesta a lograr que su trabajo se note entre los ciudadanos y, sobre todo, se sepa quién lo hace. Y ése no será otro que el presidente, José Manuel Durao Barroso. Bruselas da otra vuelta de tuerca a su estrategia de comunicación, siempre fallida, y ahora piensa en centralizar toda la información y personalizarla en Barroso.

Los nuevos actores de la UE, que el Tratado de Lisboa ha puesto en las portadas de los medios de comunicación, diluyen los mensajes y hacen que la Comisión quede en un segundo plano. Para evitarlo, la mediática comisaria Viviane Reding, ha preparado nuevos planes.

Barroso asiste al seminario sobre estrategia de comunicación / Foto:CE

Periodistas y televisión durante las 24 horas al servicio del presidente de la Comisión europea, José Manuel Durao Barroso. Ésa es la clave para que el jefe del ejecutivo europeo tenga el protagonismo de la acción de Bruselas, según la nueva estrategia de comunicación que se prepara.

Según el portal EuroActiv, detrás de todo esto está la comisaria de Justicia, Derechos Fundamentales y Ciudadanía, Viviane Reding, a quien Barroso dio también las competencias de Comunicación. Reding, en su anterior mandato como comisaria de Sociedad de la Información, demostró que maneja muy bien sus contactos con los medios y, de hecho, es la comisaria más conocida entre el público. Así que sus modos y maneras se van a aplicar a todo el trabajo de la Comisión.

Este jueves termina un seminario en Bruselas, en el que Reding ha informado a sus colegas de la Comisión de qué hay que hacer a partir de ahora para que el protagonismo de las portadas de prensa y de los telediarios se quede en casa. Tendrán que ceder el suyo propio al presidente, de forma que lo que hacen los 27 comisarios no se diluya en 27 nombres, sino que se concentre en uno, el de Barroso.

Reding pone ejemplos evidentes. Cuando el gobierno alemán toma una decisión, es la decisión de Merkel, y si es el gobierno francés, el responsable es Sarkozy. Incluso en otras instituciones comunitarias ocurre lo mismo y la prueba es el Banco Central Europeo, en el que el presidente Jean-Claude Trichet acapara los focos de cada una de las medidas que se toman. Pues, en adelante, todo lo que se haga en Bruselas será obra del presidente de la Comisión.

Información centralizada

Para conseguirlo, Barroso centralizará toda la información de las 27 comisarías y tendrá a su disposición fotógrafos y cámaras de televisión durante las 24 horas. Se extenderá el copago a periodistas para que le acompañen en sus viajes y se personalizarán todos los mensajes, haciéndolos más entendibles y coherentes para los ciudadanos.

Todos los departamentos de comunicación de Bruselas deberán trabajar más coordinados para unificar informaciones y se acabaron las filtraciones de documentos confidenciales. Reding tiene intención de poner al frente de puestos decisivos a personas de su confianza que garanticen la eficacia de sus planes.

Reding pide una revolución en toda la estrategia de comunicación de Bruselas, después de que la anterior responsable, la ex comisaria Margot Wälstrom, con planes menos interesados, fracasara en repetidos intentos de involucrar a los ciudadanos en la actuación de las instituciones europeas.

Supuestamente con el Tratado de Lisboa se trataba de evitar la dispersión en la toma de decisiones y ganar visibilidad internacional con las nuevas figuras del presidente permanente y la Alta Representante de Política Exterior, pero la consecuencia es que en los medios se han ampliado los nombres y caras de la Unión.

Ahora hay una doble intención: que se visibilice la acción comunitaria, pero también que el trabajo de la Comisión tenga la recompensa mediática que, en muchos casos, se llevan otros.