La Comisión Europea propone medidas para actualizar un gran número de normas de seguridad sobre los productos para niños en la UE. Los datos de los que se dispone indican que los artículos de puericultura son responsables de muchos de los accidentes y lesiones en la primera infancia, en todo el mundo.
Se calcula que, en 2007, los centros de urgencia de Estados Unidos atendieron a unos 62.000 niños menores de cinco años por lesiones causadas por productos de puericultura. Una consulta de la Comisión en los Estados miembros dio como resultado que los productos que más lesiones causan no están sujetos a ninguna normalización. Hoy se ha intentado corregir cualquier fallo en los productos del entorno del sueño.
Lo que más hacen los bebés es dormir, una media de dieciséis horas diarias, y los niños de 3 a 5 años entre once y 13 horas al día así que hay que cuidar que ese entorno sea seguro.
La comisaria de Política de los Consumidores, Meglena Kuneva, dice que «debemos mostrarnos vigilantes en nombre de nuestros consumidores más vulnerables. Las instrucciones deben ser muy claras, y los productos deben ser lo más seguros posible y superar todos los ensayos necesarios.»
Los productos que se han estudiado y a los que se aplicará la nueva normativa, son: Colchones para cunas, sacos de dormir y protectores de cuna, edredones para niños y cunas colgantes.