Alaa Arsheed, un violinista sirio de 29 años refugiado en Italia, se ha convertido en la prueba viviente de los efectos positivos que puede tener la migración en los países de acogida. «Hoy tengo la oportunidad de hacer realidad mis sueños».
euroXpress utiliza cookies para agregar funcionalidad y confeccionar estadísticas de uso de este sitio web. Puede consultar la
información técnica en este enlace.