La UE está dispuesta a intermediar en Egipto para buscar una salida a la crisis después del golpe de estado militar que derrocó al presidente Mohamed Morsi. Esta semana la Alta Representante para Política Exterior, Catherine Ashton, se ha entrevistado en Egipto con representantes del Gobierno interino y de los Hermanos Musulmanes.
La Unión Europea ha advertido a Egipto de sobre los peligros de la transición democrática del país si no se respetan los derechos de la oposición. Ashton ha pedido «diálogo y tolerancia» y ha criticado la detención de ahmed Maher, líder juvenil de la oposición. La UE sigue con preocupación la difícil situación política y económica del país mediterráneo.
Los estallidos de violencia en Egipto, al conmemorarse el segundo aniversario del comienzo de la revolución del 25 de Enero, plantean varios interrogantes sobre el futuro del país. Las protestas masivas del pasado viernes contra el gobierno derivaron en enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad que dejaron por lo menos 40 personas muertas.
Los ministros de exteriores de la Unión Europea piden que la violencia remita en Egipto y que haya un diálogo plenamente inclusivo. Ante el referéndum constitucional de este sábado, piden al presidente egipcio, Mohamed Mursi, que «la Constitución funcione para todo el mundo». «Es la guardiana del futuro del país», ha dicho Catherine Ashton.
Los ministros de Exteriores de la Unión Europea han pedido al nuevo presidente egipcio, Mohamed Mursi, que garantice la separación de poderes en el país y el estado de derecho, y que asegure la participación de una sociedad civil independiente en la vida democrática. No parece que de momento vaya a poder cumplir esa petición, todavía no sabe ante quien deberá jurar el cargo el próximo sábado.
EL CAIRO, (IPS) - La nueva crisis política en Egipto despierta temores de que las primeras elecciones parlamentarias tras la caída del régimen de Hosni Mubarak (1981-2011), previstas para dentro de cuatro días, sean finalmente canceladas. La UE avisa que se celebrarían sin la presencia de observadores internacionales, que han sido rechazados por las autoridades.
Mientras, continúan los combates entre manifestantes y fuerzas de seguridad que culminaron el martes 22 por la noche en una multitudinaria protesta en la Plaza Tahrir, en el centro de El Cairo, para exigir a los militares que abandonen el poder.