Comienza en Recife (Brasil) la reunión anual de la CICAA -Comisión Internacional para la Conservación del Atún Rojo Atlántico- acuden a la reunión los 51 países miembros. Las conversaciones van a tratar de forma preferente la reducción de Totales Admisibles de Capturas (TAC) para el próximo año que posibilite la recuperación de la especie en el Atlántico y el Mediterráneo, que se encuentran en estado crítico.
La UE es el socio de la CICAA que más atún rojo pesca y España el Estado miembro con más cuota.
El comisario de Asuntos Marítimos y Pesca, Joe Borg, ha dicho «Nos toca tomar decisiones difíciles, pero ese es el precio que hay que pagar para garantizar el futuro de las pesquerías afectadas. La UE desempeñará plenamente su papel como una de las principales partes interesadas en esta pesca.»
La UE estaría dispuesta a aceptar una reducción de pesca de las 22.000 toneladas actuales a 15.000. Este año la cuota que le ha correspondido a Europa ha sido de 12.409 toneladas de las cuales 4.115 ha sido el cupo de España.
Durante años la CICAA ha establecido cuotas de pesca superiores a lo que recomendaban los científicos, a esto habría que añadirle un 30 % más de pesca ilegal. Todo esto ha puesto en peligro la supervivencia del atún rojo o atún de aleta azul. Sobre todo a la población del Mediterráneo, aunque también la del Atlántico occidental y el Atlántico sur están disminuyendo de forma peligrosa.
Algunos países liderados por Mónaco defienden la propuesta de prohibir el comercio internacional de atún rojo. Consistiría en clasificar el pez como especie en peligro de extinción dentro de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas (CITES), la posible inclusión se verá en la próxima reunión de esta organización el próximo marzo.
La mayor parte del consumo del atún rojo se registra en Asia, sobre todo en Japón, donde su carne es muy apreciada.
Ver informe científico del CICAA adoptado el pasado 23 de octubre en Madrid.