Viviane Reding recula. En un espectáculo insólito en la UE, la comisaria europea de Justicia criticó a España por usar la presidencia española como «una marioneta al servicio de sus intereses nacionales para conseguir efímeras proezas políticas». Tres días después, Reding lamenta la polémica y reconoce los logros españoles al frente de la Unión.
El enfrentamiento entre la comisaria y la presidencia española explotó el pasado viernes en el consejo de ministros de Justicia, que aprobó remitir al Parlamento europeo la propuesta española de euroorden de protección de víctimas. España aseguraba que matemáticamente tenía el respaldo de una mayoría de Estados y Reding, que esa mayoría no era cualificada.
La comisaria se había opuesto ya anteriormente al proyecto español por considerar que no beneficiaría a las víctimas de violencia de género, sino a los abogados que harían un buen negocio en los litigios transnacionales. Reding prefería hacer ella misma un proyecto más estudiado que tuviera el consenso de los 27. Como su propuesta no prosperó, la comisaria llegó a decir que el proyecto español es «chapucero» y la presidencia española de la UE «poco razonable.»
La secretaría de Política internacional del PSOE, Elena Valenciano, pidió este lunes una explicación o una rectificación a Reding por los reproches a España que calificó de inéditos en la UE e injustos. Valenciano dijo que parece «un empeño de Reding en bloquear esa decisión que viene dificultando desde el principio y nos gustaría saber por qué».
Casi al mismo tiempo que el PSOE protestaba, la comisaria difundía un comunicado en el que rectificaba sus críticas y reconocía «logros históricos de la presidencia española». Reding no cita el caso de la polémica euroorden, pero se muestra ahora decidida a continuar «la labor constructiva que ha marcado el semestre español». euroXpress