Visto bueno de la UE y el FMI para conceder nuevas ayudas a Grecia

Grecia recibirá la ayuda necesaria de la UE para evitar la suspensión de pagos. La misión de expertos de la Comisión Europea, el Fondo Monetario Internacional y el Banco Central Europeo que han evaluado las medidas adoptadas por el gobierno de Atenas han concluido de forma positiva. Se entregarán los 12.000 millones de euros pendientes aún del rescate europeo y se abre la puerta a una financiación adicional que podría llegar a los 65.000 millones, a cambio de un todavía más estricto plan de ajuste y con participación de los bancos acreedores.

Y. Papandreu y J.C. Juncker
Y. Papandreu y J.C. Juncker

El ministro griego de Finanzas ha anunciado que las negociaciones con la UE han terminado con éxito, de forma que Grecia puede poner otro parte a sus maltrechas finanzas y pagar a los acreedores con los 12.000 millones de euros que recibirá de la UE la deuda que vence este mes de julio. Es el quinto tramo del crédito de 110.000 millones concedido el año pasado. No se espera que haya problemas en la aprobación final del Eurogrupo, el próximo 20 de junio.

A cambio, Grecia pondrá en marcha un plan para conseguir 78.000 millones de euros, mediante la reducción de gastos y un ambicioso plan de privatizaciones que le reportará 50.000 millones desde ahora hasta 2015. Pasarán a manos privadas 30 empresas, que incluyen los ferrocarriles, puertos, aeropuertos, loterías, electricidad, compañías de suministro de agua y de gestión de autovías.

Además el gobierno heleno tendrá que impulsar nuevas reformas fiscales y estructurales y recortar otra vez el número de empleados públicos, los programas sociales y las exenciones fiscales.

Según dice en un comunicado la troika de expertos que ha examinado las finanzas griegas, "la implementación estricta ayudará a restaurar la sostenibilidad fiscal, salvaguardar la estabilidad del sector financiero e impulsar la competitividad para crear las condiciones para un empleo y un crecimiento sostenido".

Grecia soluciona así su crisis más inmediata, pero no dispone de fondos para para pagar a los acreedores el año que viene. El plan aprobado ahora tiene la vista puesta para entonces, mediante otra fondo adicional de laUE y le FMI de hasta 65.000 millones de euros, un segundo plan de rescate al que nadie quiere llamar así. Grecia no puede acudir a los mercados para refinanciarse por los altos intereses que se le piden.

"Preveo que el Eurogrupo acepte una financiación adicional para Grecia, bajo condiciones estrictas, por supuesto, y éstas incluirán la implicación del sector privado bajo una base voluntaria", ha dicho el presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, tras reunirse con el primer ministro griego, Yorgos Papandreu, este viernes en Luxemburgo.

La idea es que los bancos, sobre todo alemanes y franceses, principales acreedores de deuda griega cambien los bonos que vencen en 2012 y 2013 por otros con fechas muy posteriores, aunque esto tendrá que ser negociado con el sector privado.

A pesar del respaldo europeo, el gobierno griego sigue teniendo varios frentes abiertos en contra. En el Parlamento, la oposición rechaza los planes de austeridad y dentro de su propio partido ya hay críticas abiertas. En la calle, la mayoría de la población se opone a los nuevos recortes y los sindicatos han convocado una nueva huelga general para julio. En los mercados, la incertidumbre no acaba. La agencia Moody's rebajó el miércoles la deuda griega otros tres peldaños.