Cerca de 20.000 funcionarios en huelga se manifestaron en Atenas y Salónica para pedir al gobierno que suspenda la reforma del sector público y denunciar la muerte del militante antifascista Pavlo Fyssas, de 34 años.
En la madrugada del miércoles un individuo de 45 años, miembro del partido neonazi Amanecer Dorado, asestó varias puñaladas al rapero antifascista, que murió a consecuencia de ellas. En un mensaje televisado el primer ministro griego, Antonis Samaras, ha dicho este jueves que no tolerará que el partido neonazi Amanecer Dorado «mine la vida social y la democracia».
«El gobierno está determinado a no permitir que los descendientes de los nazis envenenen la vida social, cometan crímenes , intimiden y minen los fundamentos del país que dio nacimiento a la democracia», añadió Samaras.
Por su parte el presidente de la República, Carolos Papulias, instaba al «despertar social e institucional» y a la «voluntad política de luchar contra esta ignominia». «Todos tenemos el deber de no dejarle las puertas abiertas al fascismo», ha dicho en un comunicado.
En una de las manifestaciones en Atenas un representante del principal sindicato, Adedy, decía «Denunciamos la muerte perpetrada por Amanecer Dorado cuya violencia se recrudece».
Los funcionarios pierden su trabajo
Un total de 4.000 funcionarios perderán su empleo y otros 25.000 estarán 'disponibles', un eufemismo que utiliza el gobierno que significa en realidad que también irán a la calle, de aquí a final de año. De esta manera se cumple lo convenido en los acuerdos del rescate.
Este domingo llegarán los 'hombres de negro' a Atenas para ver como va el cumplimiento de las reformas y la cuantía del nuevo rescate que va a necesitar.
Una cierta mejoría en el empleo, del 27,4 por ciento al 27,1 por ciento por primera vez en cuatro años, debida a un buen verano ha hecho que el gobierno comience a hablar de recuperación. Aunque según los expertos solo se puede hablar de «tendencia hacia una menor recesión». El desempleo juvenil en grecia es del 59 por ciento.