El presidente de la UE, Herman van Rompuy, se ha mostrado preocupado por el incremento de los populismos en Europa porque «suponen una amenaza para la libre circulación de personas». El presidente europeo ha hecho estas declaraciones en Rumanía, un país que no se puede acoger al espacio Schengen. Estas reflexiones se producen en vísperas de una reunión de ministros de interior.
Van Rompuy ha explicado esta preocupación durante una visita oficial a Rumanía, cuya adhesión al espacio Schengen está bloqueada por el gobierno holandés presionado por el partido populista de extrema derecha PVV de Geert Wilders. El presidente europeo también ha expresado su opinión en su cuenta de twitter «Desgraciadamente los vientos del populismo amenazan una de las grandes conquistas de la integración europea: la libre cirulación de personas»
No sólo Holanda pone trabas, también la han puesto en cuestión Francia y Alemania que piden que se restablezcan los controles fronterizos nacionales. Lanzado a la consquista de los votos de la extrema derecha, el presidente francés, Nicolás Sarkozy, vuelve a presionar a la UE sobre esta demanda.
El espacio Schengen permite a los ciudadanos de 26 países (22 de la UE, Islandia, Noruega, Suiza y Liechtenstein) circular libremente sin controles fronterizos. Reino Unido, Irlanda, Chipre, Rumanía y Bulgaria están fuera del espacio Schengen.
Van Rompuy ha visitado Rumanía coincidiendo con la firma de adhesión a la UE, el 25 de abril de 2005 en Luxemburgo, hace ahora 7 años. El presidente europeo ha destacado el cambio que ha vivido ese país desde esa fecha y ha insistido en que el país sigue siendo un cruce de caminos y culturas entre la Europa central, el Este y los Balcanes.