Francia ha recortado su previsión de crecimiento y anunciado medidas de ahorro para este año y el siguiente. El primer ministro Francois Fillon, ha salido a la palestra para anunciar la rebaja en la estimación de crecimiento para 2012 a un 1,75% desde el 2,0% para este año y a 1,75% desde el 2,25% para el próximo. También ha anunciado las nuevas medidas que ha tomado el gobierno para evitar que la desaceleración de la economía afecte a su calificación que pende de un hilo.
Para empezar, una nueva tasa a los más ricos, es decir, aquellos que tengan ingresos anuales superiores a 500.000 euros, que deberán pagar el 3% de sus ingresos del trabajo y del capital. Una medida que se derogará cuando el déficit del PIB esté en el 3% algo que se espera para 2013. También se modificará el impuesto a las ganancias del capital inmobiliario. Con eso el gobierno francés espera recaudar unos 200 millones de euros. Este nuevo impuesto responde a la carta que un día antes 16 de los presidentes de las mayores empresas de Francia, entre las que se encuentran las mayores fortunas, publicaron pidiendo poder hacer un aporte excepcional para reducir el déficit.
Pero los que menos tienen también deberán pagar más. Sube un 6% el tabaco inmediatamente, y el alcohol y las bebidas edulcoradas el próximo año. El porcentaje para fines sociales al rendimiento del capital pasa del 12,3% al 13,5%. Las entradas a los parques temáticos serán más caras, su IVA pasará del 5,5% al 19,5% que dará 90 millones de euros en un año al Estado. El impuesto de sociedades se igualará con el de Alemania. Una medida que acordaron Sarkozy y Angela Merkel en su reunión bilateral del pasado viernes.
El primer ministro, François Fillon, ha dejado claro que las horas extraordinarias seguirán sin tributar. Nicolás Sarkozy ha hecho de esa medida el centro de su campaña electoral «trabajar más para ganar más» dice su eslógan.