Los líderes de la UE estuvieron de acuerdo en el Consejo de la pasada semana en firmar un acuerdo de libre comercio con Ucrania si esta da muestras de solucionar el caso de la ex primera ministra que para muchos países de la Unión es una «justicia selectiva».
Hace unos días el presidente ucraniano, Víctor Yanukóvich, pareció dispuesto a promulgar una ley que permita a Timochenko viajar al extranjero para recibir tratamiento médico una decisión que se interpretó como un acercamiento a la UE.
La ex primera ministra fue condenada a prisión en 2011 por abuso de poder en la firma de contratos de gas con Rusia. Desde hace más de un año está internada en un hospital de Járkov por problemas de salud.
El presidente del grupo de observadores del Parlamento europeo en Ucrania, Pat Cox, explica que aunque en estos momentos Ucrania no cumple todas las condiciones necesarias estará lista para la fecha prevista en su opinión.
Según Cox, esperan conseguir en las próximas semanas que Timochenko sea trasladada a Berlin para que pueda curarse, y entonces «la iniciativa parlamentaria y la alta diplomacia política contribuirán a que nuestra misión tenga éxito».
La UE tiene mucho interés en impulsar su presencia en las ex repúblicas soviéticas por medio de la llamada Asociación Oriental y Ucrania sería uno de los socios más importantes.
Por su parte, Rusia no quiere tampoco perder a Ucrania para su Asociación Aduanera incompatible con la europea.
Este lunes ha dicho el ministro de Asuntos Exteriores ruso Serguéi Lavrov, que en caso de que Kiev firme el acuerdo con la UE «no habrá ninguna ruptura en nuestras relaciones (comerciales), que se mantendrán en base al principio de máximo favorecimiento, como está previsto».
Aunque advierte de que, «apenas se aplicarán (a Ucrania) franquicias adicionales estipuladas en el acuerdo de libre comercio de la Comunidad de Estados Independientes si Ucrania se inunda con mercancías de la UE». Rusia no quiere que productos de la UE puedan pasar de estos países a Rusia.
Por su parte el ministro de Asuntos Exteriores de España, José Manuel García-Margallo, que se encuentra en Vilna ha destacado la importancia geoestratégica del Partenariado Oriental para la UE y ha resaltado que uno de los objetivos de su viaje ha sido «compartir las preocupaciones y enseñanzas» en ese sentido con Polonia, Lituania y Estonia.