Por Ángela Gonzalo (Bilbao)
En Lituania, los trabajadores que llevan poco tiempo trabajando en una empresa tienen mayor riesgo de sufrir un accidente laboral que los que llevan más tiempo. Lo ha dicho la ministra de trabajo Lituana durante la clausura de la campaña bienal de EU-OSHA «Trabajando juntos para la prevención de riesgos». La secretaria general de los sindicatos europeos, Bernardette Ségol, ha criticado a la Comisión Europea por no legislar sobre derechos laborales y concretamente sobre seguridad laboral.
Tripartito, ha sido la palabra más repetida en Bilbao. Sindicatos y empresarios han coincidido en la importancia de mantener un diálogo constructivo entre los agentes sociales y las administraciones para mejorar la seguridad laboral en Europa. Aunque Ségol, ha dicho que con tantas legislaciones nacionales se corre el riesgo de convertirse en una «jungla normativa», si la Comisión no legisla a escala europea y deja que cada estado desarrolle legislaciones nacionales sin principios comunes. Kris De Meester, representante de la patronal europea, ha pedido también diálogo a la Comisión y que se comprometa con los acuerdos alcanzados. Para De Meester «no se llega a compromisos duros» y critica que hay una falta de objetivo común. «Fomentemos un verdadero debate para alcanzar compromisos que se mantengan enel tiempo», ha dicho en Bilbao. Y ha añadido «debamos debatir al principio de unas conversaciones, no cuando ya se han tomado decisiones» políticas.
La directora de EU-OSHA, Chista Sedlastschek, ha recordado que «el diálogo social es importante, y en unos países funciona mejor que en otros. Con el diálogo todos salimos ganando». En la Cumbre de Trabajos saludables, se ha destacado que la seguridad y la salud en el Trabajo (SST) es una inversión para las propias empresas, y supone un ahorro económico. Porque algunos de los costes que supone no tenerlo en cuenta, son difíciles de cuantificar. ¿Cómo poner precio al dolor y sufrimiento por una muerte, al fin prematuro de una carrera profesional? ¿Cómo lo cuantificamos?, se ha preguntado Sedlastschek. La secretaria general de CES-UTEC, Ségol, ha denunciado la pasividad de las administraciones para frenar el aumento de cáncer relacionado con el trabajo. «Cada año, ha dicho la representante de los sindicatos europeos, mueren entre 160.000 y 500.000 personas por un cáncer vinculado a agentes cancerígenos en el puesto de trabajo. «Hay que reducir la carga que supone para la población» este tipo de enfermedad laboral.
Para la Agencia Europea de Salud y Seguridad en el Trabajo, la campaña «Trabajando juntos para la prevención de riesgos», ha sido una de las más exitosas desde que se iniciaron en 2000. Sobre todo por la implicación de las partes afectadas. En abril se lanzará la nueva campaña bienal centrada en los riesgos laborales que supone el estrés en el trabajo.