Llega a la Unión Europea el «Schengen teléfonico». En principio se acabaron los sustos de los ciudadanos al ver la factura del móvil cuando regresaban a su casa de un viaje por el continente. Quienes no viajan no saben lo que es el roaming, pero los que lo han hecho lo han sufrido en sus bolsillos. La Comisión Europea eliminará el roaming a partir del 1 de julio de 2014. Eso significa que cuando se visite un país europeo por motivos de trabajo o de turismo, no habrá coste adicional en la tarifa y se pagará el mismo precio que las llamadas nacionales.

Tampoco se pagará por los mensajes de texto o el acceso a internet. Aun así los detalles de lo que han pactado los responsables políticos de Bruselas y los gestores de las empresas de telecomunicación se darán a conocer en los próximos días. Para la Comisión, que lleva años negociando un acuerdo, hay que acabar con los costes desmesurados y además también será beneficioso para las compañías.

Las empresas de Telecomunicaciones europeas tienen un importante beneficio con la europa de la movilidad de los ciudadanos, donde cada año millones de europeos viajan de uno a otro país. Se calcula que anualmente un 2 por ciento de su factura proviene del roaming y parece difícil que estén dispuestos a perder esos ingresos a cambio de nada. De momento la Comisión ha anunciado que tomará una serie de medidas para que la medida no les afecte demasiado.

Para la CE el modelo actual es insostenible y es necesario consolidar el mercado de operadores europeos de telefonía móvil porque hay excesivas empresas que ofrecen los mismos servicios en diferentes países. Bruselas lleva tiempo endureciendo las reglamentaciones destinadas a poner fin a unas facturas elevadas, que sangraban el bolsillo de los ciudadanos «itinerantes». En Europa hay unos 100 operadores, mientras que en Estados Unidos, con un mercado inferior hay cuatro. Además el territorio europeo tiene menos cobertura 4G que África.

De momento el 1 de julio de este año entran en vigor las nuevas rebajas de los precios máximos que pueden aplicar las compañías.

· Hacer una llamada. Saldrá por 29 céntimos por minuto en lugar de los 35,1 céntimos actuales.

· Recibir una llamada. Tendrá un coste de 8,5 céntimos por minuto. En la actualidad cuesta 9,7 céntimos.

· Enviar un SMS. Costará 9,7 céntimos. Hasta el 30 de junio salen por 10,9 céntimos. Recibirlos no tiene ningún coste.

· Navegar por Internet. El precio de cada MB será de 54,4 céntimos, pero es el concepto que más se rebaja, ya que actualmente es de 84,7 céntimos.