Son muchas las formas que los ciudadanos tienen para luchar contra el cambio climático, una de ellas es la de comer menos carne, como animan Paul McCartney y el presidente del Panel Intergubernamental del Cambio Climático, Ragendra Pachauri desde el parlamento Europeo.
Según un informe de la FAO, la ganadería contribuye al 18% de las emisiones totales de gases de efecto invernadero, dos veces más que el transporte. La campaña de Paul McCartney, lunes sin carne podría ayudar a los países a reducir la tasa de carbono que emiten a la atmósfera, pero también ayudaría a las personas que tendrían una alimentación más sana.
Jerzy Buzek, presidente del Parlamento Europeo ha dicho que la campaña le parece una buena idea porque está comprobado el enorme impacto que tiene la ganadería en el medio ambiente.
El dr. Alan Dangour de la Escuela de medicina tropical de Londres estima que en el Reino Unido, donde los adultos consumen un kilo de carne a la semana, una reducción del 30% de grasas saturadas evitaría 18.000 muertes prematuras por enfermedades cardiacas al año.
Otro de los problemas es que, en la actualidad, se utilizan tierras cultivables para producir alimento para los animales, son necesarios 8 kilos de maíz para producir uno de carne.
Además de los gases de efecto invernadero la ganadería, ha dicho McCartney, influye en la deforestación, el aumento del consumo y la contaminación del agua.