Schäuble, ministro alemán de Finanzas, se postula como jefe del Eurogrupo

La presidencia del Eurogrupo es un cargo que muchos dirigentes europeos quieren pero que nadie, hasta ahora, se ha atrevido a reclamar. El ortodoxo ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schäuble, lo ha hecho. Dice que, de todas formas, tiene que implicarse en la marcha de los países de la moneda común y que no ha escuchado ningún rechazo de sus colegas a su nombramiento.

Schäuble, con el actual presidente del Eurogrupo, Juncker
Schäuble, con el actual presidente del Eurogrupo, Juncker / Foto: Consejo UE

Schäuble se deja querer, entre bromas. Dice en el semanario Welt am Sonntag que no ha escuchado a ninguno de sus colegas decir «Dios mío, que no sea Schäuble». De modo que indirecta pero públicamente confiesa aspirar a suceder al primer ministro luxemburgués, Jean-Claude Juncker, como presidente del Eurogrupo.

«Como ministro alemán de Finanzas tengo que involucrarme en cualquier caso con intensidad, así que no voy a oponerme a asumir la presidencia, como han hecho otros», declara el ministro, quien elogia la labor del actual presidente al decir que espera que «el Eurogrupo siga funcionando tan bien como hasta ahora».

A pesar de la interminable crisis del euro, el ministro alemán de Finanzas es optimista de cara al futuro hasta el punto de que imagina que «en diez años todos los miembros de la Unión Europea tengan el euro», incluso otros países, como Noruega o Suiza.

Él, que ha sido el único capaz de decir que la eurozona podría asumir una salida de Grecia de la moneda única, en esta entrevista se muestra conciliador y dispuesto a hablar de crecimiento en el país, «si los griegos tienen alguna idea de lo que podemos hacer»; pero advierte de que las reformas acordadas son fundamentales, «de lo contrario, el país no tiene futuro».

Schäuble dice esperar las propuestas del presidente electo de Francia, François Hollande, pero recuerda que «los contratos hay que respetarlos. Lo mismo pasa con el pacto fiscal». Eso sí, insiste en que la cooperación francoalemana es el núcleo de la integración europea.