Santa Claus o Papá Noel, ha recibido este año unas 50.000 cartas que recogen sueños y deseos de miles de personas en el mundo, la mayoría niños y niñas que esperan con ansiedad sus regalos la noche del 24 de diciembre. También él ha expresado su deseo. «Quiero la paz mundial, pero espero que todo el mundo encuentre primero la paz dentro de sí mismo, y luego con sus amigos, familiares y vecinos. Eso es por lo que debemos empezar», ha dicho en su tradicional mensaje navideño.
Papa Noel sabe de los problemas del mundo. «Este ha sido un año difícil, con importantes problemas financieros de todo el mundo. Ha sido muy agitado y muy difícil en muchos países, así que mi gran deseo -la paz en el mundo- todavía no se ha conseguido. Pero yo tengo una mente positiva y creo que los líderes mundiales están trabajando en ello. Espero que todos puedan pasar la Navidad con sus seres queridos y encontrar tiempo para ayudar a los demás. Les deseo a todos una muy Feliz Navidad y un Año Nuevo muy feliz».
La longevidad de este hombrecillo rechoncho y con buen humor ha llamado la atención del mundo científico. Más joven que los Reyes Magos, los médicos calculan que podría tener entre 300 y 500 años, que ha desarrollado un sistema inmune muy sofisticado que le permite superar posibles infecciones. Incluso sus «kilos de más» podrían ser beneficiosos ya que las diferentes capas de grasa le protegen del frío. Aún así hay incógnitas que no han podido desvelarse como el hecho de que puede llevar tantos regalos en un solo saco, aunque en eso también tienen que ver sus pequeños ayudantes, los elfos.
El largo viaje de Papa Noel o Santa Claus se inicia en Rovaniemi, una población finlandesa alejada de cualquier gran ciudad. Aún así casi medio millón de personas la visitan, la mayoría extranjeros. Un negocio que aporta unos 200 millones de euros anuales a esta ciudad donde viven unas 61.000 personas. Ellos tienen el privilegio de ver durante todo el año, al anciano personaje.