¿Cesión de soberanía? ¿Eurobonos? ¿Ayuda financiera a los Estados en dificultades? El mantra del «más Europa» desaparece en Alemania cuando se trata de política interna y se torna en una idea que sería bien recibida por la población: celebrar una consulta popular sobre las relaciones de Alemania y la UE. Políticos de todas las tendencias se suman al carro del referéndum. Merkel, de momento, no.
La economía española se contraerá este año un 1,7% y un 1,2% en 2013, según el Fondo Monetario Internacional, que revisa cifras anteriores menos negativas tras las medidas de austeridad impuestas por Bruselas y puestas en marcha por el gobierno de Rajoy. Lo peor es que el FMI no cree que España consiga tampoco así reducir el déficit hasta los objetivos previstos.
La ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de Londres ha sido espectacular, divertida, pop y muy «british». Londres se ha expuesto ante el mundo con todos los tópicos británicos, desde Mr. Bean a James Bond y a la propia reina de Inglaterra, con el mejor humor y la mejor demostración de que los Juegos se celebran en un país que valora y ama el deporte.
Habló Draghi y se alivió la presión sobre la deuda soberana. Pero esta vez no serán suficientes las promesas para los insaciables mercados. Hace falta actuar ya y Alemania lo sabe. Por eso, obligada a ceder, Merkel ha ratificado junto al presidente francés, François Hollande, las palabras del presidente del BCE para «hacer todo lo necesario para salvar al euro». El Banco Central Europeo y el Bundesbank ya trabajan en la fórmula para comprar bonos españoles e italianos.
Tres de los cuatro grupos terroristas de Irlanda del Norte se han unido recuperando el nombre del inactivo Ejercito Republicano Irlandés (IRA) para retomar la lucha armada ante lo que consideran una «falsa paz» para Irlanda y una «provocación» del Reino Unido. Han pasado catorce años desde los acuerdos de Viernes Santo que pusieron fin a décadas de sangriento conflicto en el Ulster.
En su primer viaje a Grecia desde que comenzó la crisis, el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, ha lanzado una advertencia a los griegos: si sigue habiendo retrasos en las reformas prometidas, no se materializará el segundo rescate europeo. El jefe del ejecutivo comunitario ha asegurado en Atenas que las consecuencias de una salida del euro serían peores que los sacrificios que exige Bruselas.
Han bastado unas imprecisas palabras del presidente del Banco Central Europeo para que la prima de riesgo española caiga 50 puntos. Mario Draghi ha asegurado que la institución monetaria está dispuesta a «hacer todo lo posible» para salvar al euro y eso incluye actuar para contener los elevados costes de financiación de los países.