Más de dos tercios de los ciudadanos de la UE tienen una visión positiva de los robots, según demuestra una encuesta de Eurobarómetro. La mayoría cree que son necesarios para realizar trabajos difíciles o peligrosos y que, en general, «ayudan a la gente». No piense en los robots de La Guerra de las Galaxias, entrañables R2D2 y C3P0, o en el temible HAL de 2001 una odisea del espacio. Hablamos de soluciones en medicina, educación o industria.
El grupo ruso punk Pussy Riot, hoy famoso en todo el mundo, tras ser condenadas sus integrantes a dos años de cárcel por burlarse de Vladimir Putin y pedir su dimisión, están seleccionadas entre los candidatos de la Eurocámara para el Premio Sajarov a la Libertad de Conciencia. Comparten ese honor con activistas en favor de los derechos humanos de Bielorrusia, Pakistán, Ruanda e Irán.
Antes de que acabe septiembre, el gobierno español aprobará un nuevo programa de reformas, siguiendo las recomendaciones de la Comisión Europea, «con compromisos claros y un calendario preciso». Si es necesario para cumplir los objetivos de déficit, habrá nuevos ajustes. Es el compromiso manifestado este viernes por el ministro de Economía, Luis de Guindos, ante sus socios del Eurogrupo.
El gobierno español explica este viernes a sus socios de la eurozona que el ajuste y el programa de reformas está encaminado y que todavía esperará antes de decidir si pide el rescate o no. El ministro de Economía, Luis de Guindos, asegura que el Eurogrupo no impondría nuevas condiciones a España pero, por si acaso, ya avanza «anuncios importantes» en materia de reformas.
La política europea es ahora una amalgama de 27 políticas nacionales y cientos de partidos que solo han mirado a Europa cuando la crisis ha obligado. Ya existen los partidos europeos, pero con una capacidad jurídica limitada y una escasa representación política desde el punto de vista de los votantes. En Bruselas imaginan unas elecciones al Parlamento Europeo con partidos transnacionales que hacen una campaña común y presentan un candidato a la presidencia de la Comisión Europea. O sea, al menos guardar las formas de una verdadera política europea.
Los liberales de derecha del primer ministro Mark Rutte han ganado las elecciones legislativas celebradas el miércoles en Holanda, pero solo con dos escaños más que el Partido Laborista. Son los dos partidos europeístas de los Países Bajos, que han barrido a euroescépticos y ultraderechistas. La formación de gobierno se presenta complicada por la distinta visión que tienen los dos partidos más votados sobre la superación de la crisis en la UE.
La troika (CE, BCE, FMI) ha concedido un año más al gobierno portugués para conseguir sus objetivos de reducir el déficit público. La disminución de los ingresos por el alza del paro y la crisis de deuda en la eurozona, sobre todo, en España, principal socio comercial, hace imposible que el alumno aventajado de Bruselas cumpla al pie de la letra sus compromisos. Es un leve respiro en los plazos, pero no en los ajustes, que aún se endurecerán más.