¿Qué significa ser transexual en la Unión Europea actual? En el 62 por ciento de los casos implica haber sufrido acoso, en el 54 por ciento ser víctima de la discriminación, en el 15 por ciento haber sido objeto de amenazas o ataques violentos, y en el 8 por ciento haber padecido violencia física o sexual. Es la realidad que refleja la encuesta sobre marginación que acaba de publicar la Agencia de los derechos Fundamentales de la Unión Europea (FRA, por sus siglas en inglés).
Ni España ni el conjunto de la Unión Europea aprueban en cooperación al desarrollo, según la red de ONGDs europeas Concord. En 2013, la Ayuda Oficial al Desarrollo total de la UE se quedó en un 0,43% de la Renta Nacional Bruta; muy lejos del compromiso del 0,7%. Harían falta 41.000 millones de euros más para alcanzar la cifra comprometida. Sólo cuatro países europeos llegan o superan al 0,7%: Dinamarca (0,80), Gran Bretaña (0,72), Luxemburgo (1) y Suecia (0,90).
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) sostiene que la entrada de inmigración supone un impacto fiscal positivo en los países receptores. Así lo acaba de subrayar su secretario general, Ángel Gurría, con datos referidos a la «práctica totalidad» de los Estados examinados, entre ellos el Reino Unido, que acapara estos días las portadas con el plan de su primer ministro para desincentivar la inmigración europea.
Mª Ángeles Fernández y J. Marcos / Lisboa
«Las imputaciones que me han hecho son absurdas, injustas y no fundamentadas». Desde la prisión de Évora, el ex primer ministro de Portugal, José Sócrates, ha alzado la voz. A través de una llamada de teléfono desde la cabina pública del penal, el político ha dictado a su abogado una carta «en defensa propia», que han publicado los medios lusos.
J. Marcos y Mª Ángeles Fernández
El número personas entre los 10 y los 24 años ha alcanzado su máximo histórico: 1.797 millones, según Naciones Unidas. Para hacerse una idea, todos estos jóvenes equivalen a tres veces y media el censo de la Unión Europea. Con una gran diferencia: la mayoría de ellos (cerca del 90 por ciento) no reside en el viejo continente sino en los llamados 'países en vías de desarrollo', donde seis de cada diez son ninis por obligación.