Este domingo, no solo Francia y Grecia han revolucionado el mapa político del viejo continente, también colabora a ello Serbia, con lo que puede ser un giro sustancial en sus estamentos de poder, tras la primera vuelta de las elecciones de este pasado domingo.
Finalmente serán dos nombres los protagonistas de la segunda vuelta que se celebrará el próximo 20 de mayo. Por un lado, el actual presidente Boris Tadic, del Partido Demócrata (DS) –en el poder desde la caída de Milosevic- y por otro Tomislav Nikolic, del Partido Progresista Serbio (SNS).
Las altas tasas de desempleo que vive Serbia en la actualidad (23,7%), una deuda externa disparada al 45% del PIB, la caída de la producción industrial y un sueldo medio que no alcanza los 400 € han marcado los debates presidenciales previos a las elecciones.
Y es que la situación actual del país vaticina un próximo cambio político donde Tadic podría no volver a ganar las elecciones tras hacerlo en 2004 y 2008. En éstas últimas pasó a la segunda vuelta con el 35,39% de los votos, ayer lo hizo con el 25,4% -según los resultados publicados por la cadena B92 con el 78,8 por ciento del escrutinio completado- y 68 diputados para el Parlamento. Una popularidad a la baja donde Nikolic, antiguo líder antinacionalista y hoy de postura moderada, le superó con un 25,5% de los votos y 73 diputados. Difícil lo tendrá el actual Presidente para igualar o superar en la segunda ronda el 50,31% de los votos de 2008 que le dieron de nuevo el poder.
Ambos, que centraron sus discursos en el crecimiento económico vital para Serbia y crucial para su próxima entrada en la Unión Europea, se caracterizan por su espíritu conciliador y europeísta y desean ver al país dentro de la UE y el euro. De momento, esto deberá esperar. Según el FMI, Serbia crecerá medio punto este año e incluso hasta 3 en 2013 pero el país no supera los preceptos para su ingreso en la Unión, como sí lo ha hecho su vecina Croacia.
Escasa participación y recuerdos de la guerra
Hay quienes rechazan que Nikolic lleve las riendas del país. Su pasado ultranacionalista podría finalmente jugarle una mala pasada y para muchos es ésta la causante de que no haya arrasado en una primera vuelta.
Fue estrecho colaborador de Vojislav Seselj, acusado por el Tribunal Penal Internacional por reclutar y financiar a grupos paramilitares para secuestrar a la población no serbia durante la guerra. Además pese a su deseo actual de formar parte de la UE, aún se le recuerdan sus declaraciones en las que afirmaba que prefería que Serbia fuera antes una provincia de Rusia que un país adherido a la UE. ¿Es por tanto una maniobra política cara a las elecciones su deseo de entrar en la Unión?
Las elecciones de ayer no despertaron muchas emociones entre la población del país, algo que juega en su contra cara a una futura entrada a la UE, donde la implicación de los ciudadanos en el juego democrático debe ser especialmente importante para que un país sea considerado a adherirse.
Según datos publicados por la organización Centro para las Elecciones Libres y la Democracia (CESID), la participación en los comicios parlamentarios y presidenciales en Serbia se ha situado en el 44,1%, un dato que contrasta con las cifras superiores de otros países europeos. Esto quiere decir que de los 6, 8 millones de serbios llamados a las urnas, apenas 3 millones tendrán la llave para decidir quienes ocuparán los diferentes consejos municipales, el Parlamento y quien será el Presidente, además de las autoridades de la provincia de Vojvodina.
Cabe destacar que los 110.000 serbios de Kosovo –ex provincia serbia autoproclamada independiente en 2008– han podido votar gracias a la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE) que hizo de mediador entre Belgrado y Pristina.
La importancia del Partido Socialista
La sorpresa de estos comicios la ha dado el Partido Socialista, convertido en clave para lograr la mayoría parlamentaría al haber quedado no tan alejado de los dos partidos más votados (25,5% y 25,4%) con un 14,4% de los votos y 44 escaños.
El líder de este SPS, que fue ex portavoz del ex presidente serbio y yugoslavo Slodoban Milosevic -que murió en 2006 mientras era procesado por el Tribunal Penal Internacional (TPI) por crímenes de guerra y contra la Humanidad- ha dejado claro que gane quien gane, tendrá que hacer caso a las peticiones de su partido si quieren colaborar estrechamente ya que «cualquiera que quiera hablar con nosotros tendrá que entender que hemos resurgido de las cenizas».
Otras fuerzas menores que han conseguido representación en uno de los mapas políticos más heterogéneos que se recuerdan en el país han sido, el Partido Democrático de Serbia (DSS) con 21 diputados; el Partido Liberal Demócrata (DS), con 20; las Regiones Unidas de Serbia (URS), con 16; la Alianza de los Húngaros Vojvodina (SVM), con cinco; y formaciones minoritarias como el SDA, el NOPO y la coalición Todos Juntos que han conseguido un escaño. Finalmente, el Partido Radical Serbio (SRS) de Vojislav Seselj, procesado por el TPI por crímenes de guerra, se queda fuera del gobierno al no haber obtenido un mínimo del 5% de votos.