En España, uno de los países europeos más afectados por la crisis económica y las medidas de austeridad, miles de personas han salido a la calle en unas 80 manfestaciones, convocadas por los principales sindicatos. Grecia ha celebrado la jornada con la segunda huelga general del año y en Francia los tres principales sindicatos se han manifestado por separado. Pocos actos más en los países europeos.
Los países mediterráneos, los más afectados por las tasas de desempleo, han sido los que más han salido a la calle para reivindicar el fin de las medidas de «austericidio». La troika es el centro de las críticas en España, Italia, Portugal, Grecia y Francia. En las últimas semanas se ha reforzado la idea de que esos gobiernos creen un bloque de oposición a la austeridad defendida por Alemania.
Las manifestaciones más masivas han tenido lugar en Madrid y Barcelona, donde los dos sindicatos mayoritarios, UGT y CC.OO., han pedido al gobierno conservador del PP, que cambie su política y convoque a un gran pacto de estado, en el que participen partidos políticos y fuerzas sociales para redactar una hoja de ruta que permita salir de la crisis. En Madrid, los líderes de los dos sindicatos han pedido menos austeridad, más políticas de estímulo económico y más atención a las necesidades de los ciudadanos».
Ignacio Fernández Toxo, líder del CC.OO., ha criticado al gobierno por «no escuchar ni al Parlamento ni a la calle» y ha dicho que el país se encuentra en un estado de «emergencia» con más de 6 millones de parados. El líder de la UGT, Cándido Méndez, ha criticado al ejecutivo de ser «un gobierno paralizado e irresponsable» y le ha pedido que cambie sus prioridades y «piense en el empleo». Ambos sindicatos han pedido «más negociación en los convenios colectivos», muchos de los cuales finalizan en junio y los sindicatos creen que están paralizados a priori por los empresarios, para poder aplicar la reforma laboral y bajar los sueldos a millones de trabajadores.
En las manifestaciones de las 80 ciudades que han convocado actos, había también afectados por la preferentes, la mayoria de ellos jubilados, que habían invertido sus ahorros en inversiones de alto riesgo, aconsejados por los bancos, y que ahora han perdido el dinero que ahorraron durante toda su vida.
Grecia, el país de la Unión Europea con mayor tasa de desempleo, se ha celebrado una huelga general, paralizando el transporte ferroviario, por carretera y marítimo. La paralización también se ha notado en centros hospitalarios y en el cierre de monumentos emblemáticos. En ese país el paro supera el 27 por ciento y el gobierno continúa con las nuevas medidas de ajuste que han supuesto recortar el salario mínimo, hasta dejarlo en 490 euros. El nuevo plan de ajuste del gobierno heleno contempla el despido de 14.000 trabajadores publicos hasta finales de 2014.
En Francia, los sindicatos han acudido divididos a la convocatoria del primero de mayo. El líder de Fuerza Obrera, Jean-Claude Mailly, se quejaba de que «es una desgracia que no podamos ponernos de acuerdo y desfilar codo con codo». Los sindicatos franceses están de acuerdo en el objetivo: bajar el paro, pero no en la manera de hacerlo. Los sindicatos han pedido «una Europa que no sea la de la austeridad y que aplique las medidas para crear empleo» y han acusado al gobierno socialista de François Hollande de «no hacer lo suficiente para frenar el paro». En Francia ya hay más de 3 millones de desempleados, una cifra histórica en el país.
Coincidiendo con el 1 de mayo los sindicatos europeos han anunciado una semana de movilizaciones a nivel europeo entre el 7 y el 15 de junio.