Con un déficit del 32% para este año y el fuerte aumento de la prima de riesgo irlandesa, los nervios crecen entre los gobiernos europeos que observan ya un ataque de los mercados similar al ocurrido a comienzos de año con Grecia. La Comisión europea ha reconocido que tiene preparado el mecanismo de rescate financiero de Irlanda por si fuera necesario.
«En caso de necesidad, y subrayo lo de en caso de necesidad, el presidente Durao Barroso ha confirmado que tenemos todos los instrumentos necesarios preparados tras la situación que vivimos la pasada primavera con otro Estado miembro», ha dicho el portavoz de la Comisión, Olivier Bailly. Se refería a la aplicación del fondo de rescate de 750.000 euros creado en mayo por la UE, tras la crisis griega, para apoyar a países de la eurozona en crisis.
Sin embargo, Irlanda no pedido asistencia financiera de Europa y asegura que puede pagar su deuda, a pesar de que los costes de financiación suben de forma imparable. La prima de riesgo (diferencia sobre lo que se paga por el bono alemán) ha pasado en un mes de 400 puntos a 680 este jueves y eso da pistas de cómo se está acelerando la especulación.
La inestabilidad de estos últimos días se ha contagiado ya a la deuda griega y portuguesa y, en menor medida, a la española. Sin embargo, la vicepresidenta del gobierno y ministra de Economía, Elena Salgado, ha dicho en Seúl, donde asiste a la cumbre del G20, que no hay riesgo para la colocación de la deuda española, que ha llegado a máximos de 214 puntos.
Según los expertos, este nuevo ataque de los mercados tiene, en parte, su origen en el acuerdo franco-alemán para que haya participación del sector privado en el mecanismo de rescate, lo que ha provocado la cautela de los inversores.