La jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, telefoneó a Brahimi, horas antes de que el mediador internacional hablara ante el Consejo de Seguridad de la ONU. Según los portavoces de la vicepresidenta europea, ambos abordaron la «extremadamente difícil situación en Siria y la prioridad inmediata de reducir la violencia».
Ashton le ha reafirmado «el pleno respaldo de la UE» a su difícil misión y le ha recalcado que puede contar no solamente con su compromiso personal, sino también con la asistencia de toda la Unión a él y a su equipo en su intento de forjar una solución política pacífica a la crisis. La alta representante se ha mostrado también muy preocupada por la situación humanitaria en Siria que «sigue siendo una prioridad para la UE».
Ashton considera que una coordinación estrecha y una acción diplomática unida por parte de la comunidad internacional son requisitos básicos para el éxito de la misión mediadora de Brahimi.Por ello, los 27 «instan a todos los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU y a todas las partes a que proporcionen al señor Brahami todo el apoyo que requiera», para lo que segurirán coordinándose de cerca con la ONU y la Liga Árabe.
El nuevo mediador internacional para Siria, pidió el martes a la comunidad internacional que preste su respaldo «urgente e indispensable» a la «difícil misión» que acaba de iniciar para detener el conflicto en el país árabe. «El apoyo de la comunidad internacional es indispensable y urgente, y ese apoyo solo será efectivo si todos tiran hacia la misma dirección», dijo el exministro argelino de 78 años ante la Asamblea General de la ONU en su primera comparecencia pública desde que asumiera su papel como sucesor de Kofi Annan.
La Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) estima que el número de personas que precisan asistencia en Siria asciende ya a 2,5 millones. En su más reciente evaluación de situación humanitaria en ese país, la OCHA adviert que en las últimas dos semanas las condiciones de vida de los sirios se deterioraron de forma aguda en Damasco y sus suburbios. Además, la situación humanitaria es deplorable en otras ciudades como Alepo, Idlib y Homs, donde continúan los enfrentamientos.
Otra agencia de la ONU, ACNUR, señala que más de 100.000 sirios salieron de su país en agosto huyendo de la violencia y buscando asilo en los países vecinos, el mayor número mensual registrado desde el inicio del conflicto en esa nación árabe, hace casi año y medio. Según datos de este organismo hasta la fecha se calcula que hay más de 234.000 los sirios refugiados en Jordania, Líbano, Iraq y Turquía.