LA FALSA CEBRA Y EL PROCESO DE PAZ
Murieron 1.400 palestinos y 13 israelíes. El informe Goldstone encargado por la ONU concluyó que la ofensiva israelí contra Gaza el pasado enero fue un acto desproporcionado destinado a castigar, humillar y aterrorizar a la población civil. Aunque el informe también señalaba a Hamás como posible responsable por crímenes contra la humanidad, rechazaba la justificación israelí de que la guerra fuera un acto defensivo como respuesta al lanzamiento de cohetes palestinos.
Durante la invasión, miles de edificios fueron destruidos. Una de las instalaciones dañadas fue el zoo de Zeitún al sur de la ciudad de Gaza. En los bombardeos murieron casi todos los animales. Dos cebras que habían sobrevivido, perecieron después por falta de atención. La población palestina tenía otras tareas más urgentes que atender.
Pasados unos meses, los conservadores del zoo, pensando en los niños y ante la imposibilidad de reemplazar los dos animales por su elevado costo, encontraron una idea luminosa propia de los tiempos de crisis. Al fin y al cabo, los niños no saben como es una cebra, y encargaron a un pintor que trazara sobre el lomo de dos pollinos blancos rayas negras con un tinte para el cabello, francés por cierto.
La llamada "comunidad internacional", las grandes potencias, primero Estados Unidos, luego Rusia, la ONU y nuestra Unión Europea han contribuido a través de los años a presentar a ese pollino famélico que es el proceso de paz como una cebra original. Lo han maquillado y cambiado de nombre a lo largo de varias décadas, Camp David, Plan Reagan, Oslo, Wye, Taba, Hoja de ruta. Muchos palestinos, entre otros Arafat, tragaron el anzuelo y creyeron que aquello que estaba firmado en negro sobre blanco, paz a cambios de territorios, era algo serio. Pero el paso del tiempo se ha llevado la tinta y ha dejado el papel en blanco. Como los burros del zoo.
El impulso al proceso de paz en Oriente Próximo es una de las prioridades de la presidencia española de la Unión, para que este año nazca un Estado Palestino que pueda vivir en paz con Israel. En Junio se celebrará en Barcelona la Cumbre por el Mediterráneo.
Pero al margen de las intenciones, la realidad, mucho más tozuda, parece ir por otros derroteros
A estas alturas, a Hamás le resulta muy difícil "maquillarse" y ponerse la piel de cordero. Acaba de conmemorar su 22 aniversario asegurando que nunca reconocerá a Israel y que reclama el territorio histórico de Palestina, entero.
Según los responsables militares israelíes, Hamás ha empleado los últimos meses en rearmarse. El movimiento fundamentalista consigue armas, dinero y suministros a través de los 400 túneles entre Gaza y Egipto.
En estas instalaciones trabajan unas 15.000 personas que manejan diariamente bienes por importe de un millón de dólares, según reconoce el alcalde de la ciudad fronteriza de Rafah, Issa Nashar, que suministra la electricidad a los túneles y cobra 2.5000 dólares de impuestos por cada uno...Para las tareas, Hamás capta militantes entre los jóvenes parados de la franja que así ganan un salario.
Pero Hamás se podría encontrar sin recursos si Egipto cumple sus planes de crear una barrera en la frontera con la franja de diez kilómetros de largo y hasta 30 metros de profundidad, que corte los túneles de suministro.
Por parte israelí, a los radicales judíos les resulta muy difícil "disimular" la construcción creciente de asentamientos en las colinas de Cisjordania, ilegales según la legislación internacional, donde viven ya medio millón de personas, en una área donde debería nacer el futuro estado palestino.
Obama afrontó rápidamente el conflicto de Oriente Próximo tras su toma de posesión. No esperó, como hicieron sus predecesores, Clinton y Bush hijo, a que la situación se deteriorara sobre el terreno. El presidente de los EEUU pidió en El Cairo la congelación de los asentamientos, pero Netanyahu miró a otro lado. Bajo presión de Washington, Israel ha anunciado, apenas, una moratoria de diez meses en la construcción de viviendas en Cisjordania. Pero eso no afecta al este de Jerusalén, la ciudad árabe ocupada desde 1967 y que Israel considera parte de su capital eterna e indivisible. Mil quinientas nuevas viviendas están en marcha en esta zona. Obama considera que esa decisión es "peligrosa, porque irrita a los palestinos y hace más difícil la paz".
Los dirigentes palestinos mantienen por su parte que no volverán a la mesa de negociaciones mientras no se detenga la construcción de asentamientos en Cisjordania o en Jerusalén "No quieren la paz" ha dicho Nabil Abu Rudeinah, portavoz de la presidencia palestina.
Además, mientras intenta controlar a Hamás en Cisjordania, Mahmud Abbas se irrita crecientemente por acciones como la reciente incursión israelí en Nablús, ciudad bajo su jurisdicción.
Israel ha exigido repetidamente el cese de la violencia como condición previa para retomar las negociaciones. Pero desde 2006 no hay atentados terroristas. ¿Para qué necesitamos volver a negociar, ahora que no tenemos problemas?, aseguran muchos israelíes. Según una reciente encuesta, apenas un 20 por ciento cree que las negociaciones pueden tener éxito.
En Gaza, el bloqueo israelí ha impedido la reconstrucción de las viviendas destruidas. El 93 por ciento de las factorías están cerradas. El paro ronda el 50 por ciento.
Un millón de personas, el ochenta por ciento de la población de la franja, sobrevive gracias a la ayuda de la UNRWA, la agencia de las Naciones Unidas para los refugiados, que ha cumplido 60 años. Su mandato era temporal, pero la tarea puede que continúe por años o décadas. "Esto es un castigo colectivo que hace la vida miserable" dice un portavoz de la agencia "La comunidad internacional no ha conseguido acabar con el bloqueo; los bombardeos israelíes han devuelto a Gaza a la edad de barro". De barro se hacen los adobes para reconstruir algunas viviendas
Hamás insiste en un intercambio de prisioneros con Israel a cambio de que Netanyahu levante el bloqueo sobre la franja. Pero los analistas militares israelíes aconsejan al primer ministro que deje el bloqueo intacto para poder debilitar al movimiento.
"Esto puede estallar en cualquier momento" asume un experto militar israelí. "Pero si estalla, haremos frente a la crisis"
En Gaza, los niños son los únicos que se tragan el engaño, de que un burro pueda ser una cebra. Pero eso no hace daño a nadie, es inocente.
En el zoo de Zeitún, entre los pocos animales que sobrevivieron, quedó un viejo tigre. De lejos parece que esta dormido. Pero no lo está.