La nueva propuesta de Bruselas para mejorar la política de inmigración comunitaria, prevista para finales de mayo, se centrará en mejorar los sistemas de asilo, las políticas migratorias que incentiven la migración legal y la lucha contra el tráfico de seres humanos. El continente europeo tiene ante sí uno de sus mayores retos: fortalecer la entrada de migrantes de forma legal. Según cálculos del Ejecutivo comunitario, en 2060 por cada persona mayor de 65 años, habrá dos con una edad de 15 a 64. Actualmente, hay cuatro personas en esa franja de edad, frente a una mayor de 65. La baja densidad demográfica y pirámides que cada vez se deforman más han puesto la luz de alarma en la UE.
«Tragedias como las de hoy, nos recuerdan que debemos adoptar medidas», ha asegurado el comisario de Asuntos de Interior, Dimitris Avramopoulos. En este sentido, Avramopoulos considera «clave» la cooperación entre los países y ha asegurado que la «solidaridad tiene que dejar de ser un eslogan para convertirse en una realidad».
Pese a que hoy Avramopoulos y el vicepresidente primero, Frans Timmermans, han avanzado que habrá una nueva propuesta en mayo sobre inmigración, han rechazado nuevos programas. La criticada operación Tritón, que opera en las costas italianas en sustitución de Mare Nostrum, cuyo gasto superaba los 9 millones de euros provenientes de las arcas italianas, se mantendrá.
A diferencia de Tritón, Mare Nostrum patrullaba más allá, se adentraba en aguas internacionales. Un operativo mucho más extenso y con mejores infraestructuras. Tritón depende de Frontex no sale de las costas italianas y tiene un presupuesto de entre 1,5 y 2,9 millones de euros. Tanto Avramopoulos como Timmermans han defendido que «si queremos más Frontex, necesitamos más dinero». Es decir, los Estados miembros deben arrimar el hombro.
En tiempos de austeridad donde las cuentas nacionales se miran al milímetro, poco países están dispuestos a dar más dinero para operaciones de lucha contra el tráfico ilegal de personas. Pese a ello, la Comisión Europea insiste en que la inmigración es una cuestión de toda Europa. «Los Estados miembros no pueden gestionarlo solos», ha insistido Timmermans.
Avramopoulos en un discurso la pasada semana insistió que «Italia no estaba sola», pese a que el gobierno de Matteo Renzi ha criticado la falta de ayuda por parte de Bruselas. Sin embargo, Timmermans, en un juego de palabras, cree que aquella operación llamada 'Mare Nostrum', ahora se puede llamar 'Europa nostra', con el objetivo de que todos los Estados se involucren.
Visita a España
El comisario Dimitris Avramopoulos ha confirmado que visitará España, aunque aún no tiene una fecha. Por el momento, ha asegurado que el Ejecutivo comunitario está aún investigando si las devoluciones en caliente que se producen en la frontera española con Marruecos son contrarias a la normativa comunitaria.
«Estamos trabajando con las autoridades españolas para acabar con los problemas que está sufriendo España», ha señalado Avramopoulos. Sin embargo, ha rechazado valorar la cuestión de Ceuta y Melilla. «Tengo que ver la situación sobre el terreno. Es difícil dar una opinión».