Si se estudian las condiciones sanitarias de las mujeres al ser madres, su estatus educativo, de salud, económico y político y el bienestar de sus hijos, Noruega es el mejor país para nacer.
La ong Save the children ha elaborado el ranking de los mejores y peores países para ser madre. Noruega, Australia e Islandia ocupan los tres primeros lugares y en ese top ten de la maternidad hay cinco países de la UE, Suecia, Dinamarca, Finlandia, Holanda, Bélgica y Alemania. España está en el puesto 13 y Estados Unidos, en el 28.
Afganistán es el país del mundo que tiene peores condiciones para las mujeres y su maternidad. Poco mejor están Niger, Chad, Guinea-Bissau y Yemen.
España ha bajado dos puestos respecto al año pasado. Según Save the children, tiene una elevada esperanza de vida femenina, 84 años, una baja tasa de riesgo de mortalidad materna, 1 por cada 16.400, y una tasa de mortalidad de menores de cinco años de 4 por cada 1.000. Sin embargo, el estudio resalta como factores negativos que una mujer gana 0,52 céntimos por cada dólar que gana un hombre y que la baja por maternidad de 16 semanas dista mucho de la duración en Dinamarca, por ejemplo, donde las mujeres disfrutan de 52 semanas.
Sin matronas, sin médico, sin escuela
Algunas diferencias de cómo es la maternidad en diferentes países del mundo hacen dudar de que todos vivamos en el siglo XXI. En Etiopía, tan sólo el 6 % de los partos recibe asistencia sanitaria. En Afganistán uno de cada cuatro niños muere antes de cumplir los cinco años de vida. En Níger, las mujeres reciben de media menos de cuatro años de educación. Las mujeres de Arabia Saudí y Palestina ganan tan sólo 16 y 12 céntimos respectivamente por cada dólar que gana un hombre.
Alberto Soteres, director en España de Save the children alerta de los grandes riesgos que soportan las madres en los países en desarrollo. «La escasez de matronas cualificadas y las dificultades para acceder a métodos anticonceptivos significa que las mujeres de los peores países para ser madre como Afganistán, Níger o Chad se enfrentan no sólo a más embarazos sino también a situaciones más peligrosas durante los partos, lo cual tiene como resultado un mayor índice de mortalidad materno-infantil.»
343.000 mujeres mueren a causa de complicaciones durante el embarazo o el parto y 9 millones de niños y niñas pierden la vida antes de cumplir los cinco años. 50 millones de mujeres dan a luz sin ayuda de personal con una cualificación sanitaria mínima. 57 países tienen escasez crítica de trabajadores sanitarios y 36 de ellos están en África. Los responsables del informe hacen un llamamiento urgente para incrementar el número de trabajadoras sanitarias en las naciones más pobres del mundo.