Zapatero, como presidente de turno del Consejo, complementará a las nuevas instituciones creadas por el Tratado de Lisboa, a quienes corresponde «dirigir, impulsar y representar a la UE». Pero el ministro español ha aclarado que no por eso la presidencia española va a renunciar a sus responsabilidades «con modestia, discreción, trabajo y apoyo». La nueva arquitectura institucional ya está creada, ahora a España le corresponde el desarrollo.
La presidencia española tiene como prioridad la apertura de Europa a una nueva economía, basada en el crecimiento sostenible, la innovación y la ciencia, elementos en los que se basará la futura estrategia de la UE que sustituya a la Agenda de Lisboa.
La ciudadanía europea es el otro gran eje de actuación para España. Avanzar en las libertades,los derechos sociales y la igualdad de género son prioridades para el gobierno, según ha dicho hoy el jefe de la diplomacia española.
Moratinos espera que durante el semestre español la UE se consolide como actor de primer orden en la política mundial y se impulse el nuevo Servicio de Acción Exterior. Además, el ministro español confía en que se concluyan las negociaciones para la adhesión de Croacia, se abran con Islandia y avancen con Turquía. euroXpress