Una tragedia de proporciones épicas que se desarrolla en el Mediterráneo, así se refieren en un comunicado conjunto los Altos Comisionados de la ONU para los Refugiados y para los Derechos Humanos, el Representante Especial para la Migración Internacional y el Desarrollo, y el Director General de la Organización Internacional para las Migraciones a las muertes de inmigrantes en el mar. 'Instan encarecidamente a los dirigentes europeos' a tener en cuenta en primer lugar la vida humana, los derechos y la dignidad de las personas cuando acuerden una respuesta común a la crisis humanitaria en el Mediterráneo.

El comunicado recuerda que la Unión Europea se basa en los principios fundamentales de humanidad, solidaridad y respeto de los derechos humanos. «Instamos a los Estados miembros de la UE a que demuestren liderazgo moral y político en la adopción de un plan de acción integral con visión de futuro que esté centrado en estos valores.»

La respuesta de la Unión Europea -dicen- tiene que ir más allá del actual enfoque de mínimos del plan de 10 puntos sobre Migraciones, que anunció la UE el lunes, que se centra principalmente en frenar la llegada de inmigrantes y refugiados a sus orillas. Como principio fundamental, la seguridad, la necesidad de protección y los derechos humanos de todos los migrantes y los refugiados deben estar en primer lugar de la respuesta de la UE.

Los líderes de la UE deben mirar más allá de la situación actual y trabajar en estrecha colaboración con los países de tránsito y de origen tanto para aliviar la situación inmediata de los inmigrantes y refugiados como para analizar de una manera integral los muchos factores que los impulsan a recurrir a tales viajes desesperados por mar.

El cumplimiento por sí solo de esas normas no va a resolver el problema de la migración irregular, pero podría aumentar los riesgos y abusos a los que tienen que hacer frente los migrantes y refugiados.

Por lo tanto, concluye el comunicado, alentamos a una acción audaz colectiva para ampliar la gama de medidas entre las que se incluyan:

Poner en marcha de forma urgente y sin demora una operación de búsqueda y rescate bien dotada de recursos, con una capacidad similar a la de Mare Nostrum y con la clara misión de salvar vidas.

Crear suficientes canales para una migración segura y regular, incluso para trabajadores migrantes poco cualificados y para personas necesitadas de reunificación familiar. Con acceso a protección cuando sea necesario, para que no tengan que recurrir a los contrabandistas.

Establecer un compromiso firme a escala de la UE para recibir a un número significativamente mayor de refugiados que el que permite las actuales cuotas, y en un número que pueda tener un impacto real, combinado con otros medios legales, para que los refugiados puedan ponerse a salvo.

Fortalecer los acuerdos de apoyo a los países que reciben la mayor cantidad de llegadas (Italia, Malta y Grecia) y distribuir la responsabilidad de manera más equitativa en toda la Unión Europea para salvar vidas y proteger a todos los necesitados.

Luchar contra la retórica racista y xenófoba que vilipendia a los migrantes y refugiados.

El comunicado está firmado por António Guterres, Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados;

Zeid Ra'ad Al Hussein, Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos; Peter Sutherland, Representante Especial del Secretario General de las Naciones Unidas para la Migración Internacional y el Desarrollo; William L. Swing, Director General de la Organización Internacional para las Migraciones