La Comisión Europea ha pedido el respaldo de los veintisiete para que se prohíba el comercio internacional de atún rojo que está poniendo a la especie en vías de extinción.
La propuesta, que debe debatirse entre todos los Estados miembros, permitirá alcanzar una posición común que la UE llevará a la reunión de la Convención Internacional de Especies amenazadas de Fauna y Flora silvestre (CITES) que tendrá lugar en Doha (Qatar) del 13 al 25 de marzo próximo.
«Tenemos una responsabilidad para con las generaciones futuras: tomar medidas decisivas cuando exista la posibilidad de que una especie desaparezca para siempre. Tenemos el deber de preservar nuestro capital natural.» ha dicho el comisario de Medio Ambiente, Janez Potocnik.
La Comisión propone que la especie se incluya en el apéndice I de la CITES en el que figuran las especies amenazadas de extinción y cuyo comercio debe estar regulado de una forma especialmente estricta. La inclusión del atún rojo en esa lista supondría la prohibición de su comercio internacional.
La comisaria de Pesca, Maria Damanaki ha incidido en que la pesca artesanal no se vería afectada y ha añadido «Nuestro objetivo es garantizar un futuro viable para los pescadores. Para ello es necesario que las poblaciones de atún rojo del Atlántico presenten un estado saludable, y es evidente para todos que la sobrepesca, no es en absoluto, la mejor forma de hacerlo.»
En la reunión de la CITES debe indicarse una fecha para que entre en vigor la disposición, la UE propone que sea en 2011 cuando se conocerán todos los informes sobre la situación de la especie. Desde 2006 la Comisión Internacional para la Conservación del Atún del Atlántico, ha adoptado medidas para controlar la población que no han hecho mucho efecto. En octubre emitirá nuevos informes científicos y será el momento de que la CITES tome la decisión definitiva.
La ministra de Medio Ambiente Elena Espinosa, ha asegurado que las recomendaciones de Bruselas «encajan» con los planteamientos de España y ha asegurado que no afectará a las almadrabas, ha añadido que en caso de que la medida salga adelante pedirá compensaciones para los pescadores.
Las más perjudicadas serán las flotas que exportan gran parte de su pesca a Japón, país que consume el 80% de las capturas mundiales de atún rojo y que no está dispuesto a prescindir de su manjar favorito, el sushi y el sashimi.