Más de la mitad de los eurodiputados europeos reciben dinero por trabajos más allá de su sueldo como representantes electos en el Parlamento Europeo. Así lo ha denunciado la oenegé Transparencia Internacional. «Es importante para los ciudadanos saber exactamente cuáles son los intereses privados que tienen mientras ejecutan funciones públicas», ha dicho el director de la organización para la Unión Europea, Carl Dolan.
Concretamente, el 53 por ciento de los 751 eurodiputados realiza actividades ajenas a su labor política europea. Los datos han sido extraídos de la declaración de intereses que están obligados a presentar en el Parlamento Europeo y han sido compilados por la organización internacional por vez primera. A pesar del esfuerzo, la objetividad de los datos es relativa por los 'errores' de los políticos al rellenar los formularios, los diferentes tipos de aclaraciones o la forma vaga en que declaran esas actividades, critica la organización internacional: «Usan términos como consultor, freelancer, gestor, o abreviaturas que no permiten una validación de los potenciales conflictos de intereses». Incluso hay siete personas que no han ofrecido datos.
A pesar de los posibles matices en las cifras, 175 eurodiputados declaran recibir por lo menos 550 euros al mes por las actividades paralelas, mientras que una docena dice ingresar más de 10.000 euros mensuales. Entre estos últimos está el exministro popular Miguel Arias Cañete, ahora comisario de Energía, cuya declaración de bienes y sus vínculos con las empresas petroleras estuvieron a punto de apartarle de esta cartera.
La oenegé asegura que estas labores externas suman hasta 18 millones de euros al año. En definitiva, 398 parlamentarios realizan más de 1.200 actividades más allá de las parlamentarias, aunque no todas remuneradas. Incluso uno ha declarado 68 actividades externas diferentes. Por países, España se sitúa por debajo de la media, ya que el 48 por ciento de los eurodiputados españoles recibe dinero extra. Mientras que en Alemania lo hace el 64 por ciento de sus representantes.
Sueldo elevado
Hace tres meses, Transparencia Internacional realizó otro estudio sobre lo que ganan en realidad los eurodiputados. Sumando el salario bruto, los gastos de oficinas y las dietas, obtienen unos rendimientos aproximados de 19.000 euros al mes, a los que hay que descontar el 22 por ciento del impuesto comunitario.
La Eurocámara permite desempeñar actividades paralelas siempre que sean comunicadas, aunque los datos declarados nunca son verificados. Por ello, Transparencia Internacional recomienda que se ofrezca una información más detallada sobre sus actividades e ingresos, y solicitan además un comité ético independiente para su monitorización, con sanciones expresas para las declaraciones falsas. «La confianza en la toma de decisiones requiere controles efectivos y sanciones creíbles sobre posibles conflictos. Desafortunadamente, los esfuerzos actuales del Parlamento son un brindis al sol», afirma el organismo.