Las nuevas normas que entran en vigor este 1 de mayo no son nuevos o diferentes derechos sociales, sólo van a garantizar que se cumplan los ya existentes en caso de traslados dentro de la UE, en materia de seguro médico, pensión, desempleo o prestaciones familiares.
Una novedad importante es la «afiliación temporal»a la seguridad social de otro Estado miembro, asegurará la percepción de un beneficio mientras las diferentes administraciones nacionales se ponen de acuerdo.
Otras novedades importantes son las que afectan a los trabajadores que se desplazan fuera de su país, tendrán derecho a percibir las ayudas familiares del lugar en el que están trabajando, aunque no tengan residencia fija.
Los que buscan trabajo fuera de su país podrán continuar cobrando el subsidio de paro por un periodo de tres meses, prorrogable a seis.
Por su parte, los jubilados que hayan trabajado en más de un país de la UE podrán sumar los diferentes periodos trabajados para calcular su pensión.
Los turistas ya tienen desde hace tiempo la tarjeta sanitaria europea
Según datos de la Comisión Europea, unos 11,3 millones de ciudadanos de la UE viven en un Estado miembro distinto al suyo. Cada año unas 250.000 personas «exportan» su pensión porque han trabajado en más de un país de la Unión.
Bruselas quiere poner en marcha en 2012 un sistema informático compartido por la seguridad social de los veintisiete que agilice los trámites y facilite la asistencia social transfronteriza.