Marte no queda tan lejos

Seis aspirantes a cosmonautas han comenzado un encierro de 18 meses para simular una misión en Marte.

Participan en el proyecto Marte 500 del Instituto Médico Biológico (IBPM) de Moscú y la Agencia Espacial Europea (ESA) con el que se pretende ayudar a comprender como reaccionarán los humanos ante un largo viaje a otro planeta.

Los seis hombres son tres rusos, dos europeos y un chino. El proyecto se ha diseñado intentando ser lo más realista posible aunque algunos elementos, como las condiciones de ingravidez de los vuelos espaciales, no se pueden recrear en la Tierra.

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en un gran hangar dos módulos de aislamiento
Módulos de aislamiento/Foto:ESA

«Nos veremos dentro de 520 días» han sido las palabras de uno de los voluntarios rusos al entrar en la nave simulada este jueves a las 10,00. La experiencia, llamada Marte 500 ha comenzado al cerrarse la puerta tras los seis voluntarios, todos hombres.

El experimento tiene lugar en el Instituto Médico Biológico (IBPM) de Moscú en colaboración con la Agencia Espacial Europea (ESA).

El italo colombiano, Diego Urbina de 27 años; el francés, Romain Charles de 31; los rusos Sukhrob Kamolov de 32; Alexey Sitev de 38 y Alexandr Smoleevskiy de 33 y el chino, Wang Yue de 26 se instalarán los primeros 250 días en un módulo de 180 m2 para el supuesto viaje de ida. Los siguientes 30 días estarán en otro recinto que imita la superficie del planeta rojo y finalmente otros 250 días para el viaje de vuelta. Durante todo ese tiempo sólo podrán comunicarse con el centro de control por correo electrónico, no es un Gran hermano, no estarán vigilados las 24 horas.

La jornada estará dividida en tres segmentos de 8 horas dedicadas al trabajo, ocio y sueño. Deberán racionar los alimentos, los mismos de los astronautas de la Estación Espacial Internacional.

Para el desayuno cereales, pan y bollos y en las comidas principales, carne, pescado o pasta.

«Será un desafío para todos nosotros. No podremos ver a nuestras familias, a nuestros amigos, pero creo que se trata a pesar de todo de un momento glorioso en nuestras vidas», ha dicho el más joven de los seis, el chino Wang Yue.

Un viaje real en el que no participan mujeres y en el que no se considera la posibilidad de que pudieran no regresar. El año pasado seis voluntarios participaron en un experimento similar en Moscú durante 105 días. La distancia entre Marte y la Tierra es de entre 55 y más de 400 millones de kilómetros, dependiendo de las órbitas de los dos planetas. Un viaje real no está previsto para antes de unos treinta años.