El debate en el Parlamento Europeo ha sido tenso. Según Rabat, los violentos incidentes del pasado 8 de noviembre se saldaron con 13 muertos, la mayor parte de ellos pertenecientes a la policía marroquí que encontró allí cócteles molotov y asesinos. Arremetió contra los periodistas españoles y hasta con los europarlamentarios por adoptar una resolución la pasada semana en la que reclaman una investigación independiente e internacional sobre lo ocurrido, aunque ni siquiera se refirieron específicamente a ninguna de las dos partes. Al término del debate, el ministro de Asuntos Exterioresa de Marruecos, Fassi-Fihri, ha acusado a la sociedad civil española de tener «complejo» de culpabilidad y por eso actuar en favor de los saharauis.
Por su parte el representante del Frente Polisario, Ouldsalek, ha dicho que la resolución demuestra «una vez más que el Parlamento Europeo tiene un importante papel como conciencia democrática de la UE» y mostró su preocupación por la inclusión de las aguas del Sáhara occidental en el acuerdo de pesca entre la UE y Marruecos.